HONDURAS: «Hacer justicia por propia mano es lo peor que puede ocurrir dentro del Estado de derecho»

El defensor de los derechos humanos es del criterio que no se puede depender únicamente de la acción del gobierno porque si la sociedad no le acompaña en esta lucha, el Estado en si pierde la unidad y al perder la unidad deja los resquicios para que siga penetrando la criminalidad.

El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, Roberto Herrera Cáceres, advirtió que la «justicia por propia mano» es lo peor que podría ocurrir dentro de un Estado de derecho, ya que se pondría en precario todo el sistema normativo y la confianza en la institucionalidad del país.
El funcionario declaró que siempre que esté el orden de cosas en el país, el monopolio de la fuerza siempre la debe tener el Estado, con el fin de mantener el orden, la paz y la seguridad.
El ombudsman hondureño reconoció que Honduras vive momentos difíciles en materia de seguridad.

Sin embargo, considera que lo que se tiene que hacer es un trabajo conjunto donde participe la sociedad civil para fortalecer la acción que realiza el gobierno, encaminada a mantener el orden y la paz interna. Agregó que es urgente un diálogo productivo entre el gobierno y la sociedad para llegar no solo a acuerdos sino a establecer planes de acción. «Necesitamos ver ese esfuerzo conjunto de la sociedad acuerpando al gobierno y el gobierno acuerpando la sociedad, utilizando óptimamente los recursos que disponemos para restablecer la normalidad en materia de seguridad en el país», afirmó el Ombudsman. 

Registros del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos indican que en Honduras, entre el año 2000 y 2013 (168 meses), murieron en forma violenta alrededor de 60,379 personas, víctimas de las armas de fuego, armas blancas y otras armas contundentes.

Consultado en torno a qué pasaría si la población empieza a tomarse la ley por su propia mano, el defensor de los derechos humanos fue contundente al señalar que «eso pondría en precario todo el sistema normativo y la confianza en la institucionalidad». Comentó que si se ha creado el Estado es para lograr bienestar pero también la seguridad ciudadana.

Herrera Cáceres reconoció el esfuerzo del gobierno encaminado a bajar el índice de criminalidad, sin embargo, considera que los hechos cotidianos están manifestando el grado de inseguridad que hay en el país.

El defensor de los derechos humanos reiteró que no se puede depender únicamente de la acción del gobierno porque si la sociedad no le acompaña en esta lucha, el Estado en si pierde la unidad y al perder la unidad deja los resquicios para que siga penetrando la criminalidad.

Según el ente estatal de derechos humanos, Honduras vive desde hace varios años en una situación de «epidemia» debido a la elevada tasa de homicidios por cada 100,000 habitantes que registra año con año.

De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), el estándar normal son 8.8 homicidios por cada 100,000 habitantes y califica de «epidemia» cuando la tasa sobrepasa ese límite.

Honduras tuvo, en los últimos años, un crecimiento acelerado en la tasa de homicidios por cada 100,000 habitantes, al pasar de 30.7 en el 2004 a 86.5 en el 2011, sobrepasando casi 10 veces más la tasa mundial establecida por la OMS.

A partir del 2012, no solo se detuvo el alza de 10 puntos que venía experimentando la tasa de homicidios por cada 100,000 habitantes en el país, en los últimos años, sino que se redujo de 86.5 a 85.5 y luego a 79 en el 2013.

 

  • Homicidios registrados en Honduras 2000/ 2013:

http://conadeh.hn/?p=480

 

FUENTE: Comisión Nacional de los Derechos Humanos de la República de Honduras