Con el propósito de garantizar el buen funcionamiento de algunos centros geriátricos, en el marco del respeto a los Derechos Humanos de las y los adultos mayores, el Defensor del Pueblo, Tarek William Saab, visitó este jueves, en horas de la mañana, la Casa Hogar Mauro de Catia ubicada en la parroquia Coche.
Este espacio, perteneciente al gobierno del Distrito Capital, es un centro geriátrico mixto, el cual se encuentra en funcionamiento desde hace dos años, con una infraestructura de dos pisos, una capacidad para albergar a treinta residentes, y, en la actualidad, tiene una población de veintidós personas, de las cuales ocho son mujeres y catorce hombres.
Al recorrer estos los espacios el Defensor del Pueblo manifestó que “esta casa queremos mostrarla como un ejemplo a seguir por todas las autoridades tanto regionales como locales de Venezuela, habida cuenta que éste es un lugar donde nuestros adultos mayores tienen su alimento garantizado, su pernocta, la atención integral de un equipo multidisciplinario que tiene a bien atenderlos en todas sus necesidades básicas. En el tema de alimentación, estimo positivo que haya una fundación dedicada a la entrega de los alimentos para este lugar, se llama Fundación de Desarrollo Endógeno Comunal Agroalimentario (Fundeca), adscrita al Gobierno del Distrito Capital”.
Asimismo, Tarek William Saab formuló algunas recomendaciones a las autoridades responsables de la Casa Hogar referidas a aspectos puntuales como, por ejemplo, incorporar al equipo humano que atiende el lugar a nutricionistas, psicólogos y psiquiatras de forma permanente, de manera que puedan estar atentos a la atención de estos adultos mayores. Igualmente destacó que debe contarse con una bomba de oxígeno, tensiómetros y nebulizadores para dar respuesta a las emergencias, así como también con una planta eléctrica que permita, a la hora de una contingencia o suspensión del servicio, continuar con el funcionamiento sin interrupciones.
El máximo representante de la Institución Nacional de Derechos Humanos hizo además referencia a una situación que estimó pertinente hacer del conocimiento de la opinión pública y es que “los geriátricos adscritos al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), en estos momentos no están aceptando nuevos ingresos de adultos mayores. (…) Quienes tienen convenio con el IVSS han manifestado que no están de acuerdo con los pagos y este hecho está ocasionando o pudiera hacerlo, de acuerdo al criterio de la Defensoría del Pueblo, violaciones obvias a Derechos Humanos de personas que están en una situación vulnerable y por eso queremos hacer la denuncia”, expresó.
En ese sentido, informó que la institución que dirige convocará a una mesa técnica para resolver esta situación. “Los dueños de los geriátricos manifiestan, incluso, la voluntad de cerrar dichos centros y si eso ha ocurrido, en los términos en que estoy denunciando, la Defensoría del Pueblo en uso de sus atribuciones tiene la oportunidad de ejercer el recurso de carácter legal para evitar que esto pase. Es la advertencia que hacemos, de la mejor forma. Vamos a establecer la mesa técnica con las autoridades tanto del Seguro Social como con los dueños de estos centros para evitar que (la situación) llegue a mayores”, precisó.
El Defensor agregó que “la Defensoría del Pueblo se ofrece como ente mediador porque la advertencia que hacemos no es sólo con los centros geriátricos. Ya están amenazando también con los centros psiquiátricos, que están siendo llevados igualmente por estas circunstancias que ya he mencionado”.
Restos de Fabricio Ojeda
El Defensor Tarek William Saab aprovechó la oportunidad para reiterar ante los medios de comunicación la propuesta que efectuó el día ayer, de llevar al Panteón Nacional los restos de Fabricio Ojeda y, en este sentido, señaló que estima importante aclarar la razón por la cual realizó esta petición. Explicó que este reconocido luchador “fue Presidente de la Junta Patriótica que lideró la acción cívico militar que dio al traste con una dictadura oprobiosa como lo fue la de Marcos Pérez Jiménez. Un periodista, maestro de escuela, político de carrera, diputado al Congreso en el año 58 y el más votado de ese momento”. Recordó que Ojeda renunció al Congreso porque consideró que estaban cerradas las vías de diálogo en el país producto de la situación de violencia que se generó en Venezuela y asumió con valentía y gallardía sus convicciones, y que cuando decidió fundar un partido político y volver a la lucha de masas, fue detenido y asesinado el 21 de junio de 1966.
“Creo que en homenaje a esa generación de valientes, de hombres y mujeres que dieron sus vidas durante esa época de insurgencia en Venezuela, pasados 50 años del asesinato de Fabricio Ojeda, es menester y reivindicativo que sus restos sean trasladados al Panteón Nacional”, explicó.
FUENTE: Defensoría del Pueblo de Venezuela
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