La Defensora del Pueblo, Beatriz Merino sostuvo ayer que en el Perú se han producido algunos pasos hacia el reconocimiento de la diversidad cultural y de los derechos de los pueblos indígenas. Sin embargo, dijo, que aún debemos trabajar con tesón para alcanzar la igualdad, la equidad, el respeto mutuo y el diálogo productivo de buena fe.
“Sabemos que los desafíos que debemos enfrentar son enormes. No podemos obviar que aún subsisten serios problemas, como la pobreza extrema, la indiferencia, la discriminación, el deterioro ambiental y el cambio climático. Por ello, ahora, más que nunca, es necesario que los representantes del Estado y los pueblos indígenas institucionalicemos el diálogo, y que todos nos dispongamos a asumir el compromiso de construir una sociedad inclusiva, conjugando la igualdad en el trato, por un lado, y el respeto de la diferencia y la identidad, por el otro.
En tal sentido, reiteró la exhortación al Congreso de la República con el propósito de que se apruebe una Ley sobre el Derecho a la Consulta, acorde con lo establecido en el Convenio 169 de la OIT. “Esa acción constituirá un aporte invalorable del Congreso de la República a la paz y un mensaje de su compromiso palpable e inequívoco con los pueblos indígenas del Perú”, afirmó Beatriz Merino.
La titular de la Defensoría del Pueblo agregó que un sincero diálogo intercultural entre el Estado y los pueblos indígenas, además del fortalecimiento de las organizaciones de estos últimos, deben convertirse en los mecanismos irreemplazables para afianzar la protección y promoción de sus derechos fundamentales.
Asimismo señaló que el camino es largo y empinado y que ahora, más que nunca, es necesario tener presente el reclamo incansable de los pueblos indígenas, que, según indicó, se puede resumir en una palabra cargada de un sentido que conmociona: respeto.
“En razón de ello, me siento especialmente complacida al saludar en su día a los hombres y mujeres que integran a los pueblos indígenas de la Costa, la Sierra la Selva, a los Apus, a los Jefes de las comunidades y a sus líderes indígenas, así como a todos los miembros de sus diferentes organizaciones representativas.
Tengo la convicción de que su existencia, su esfuerzo invalorable y su forma de vivir han contribuido a la formación de nuestra configuración cultural, y que continuará permeando con su admirable riqueza a nuestra esencia nacional” finalizó.
FUENTE: Defensoría del Pueblo del Perú.