Las informaciones que han trascendido revelan el infierno en vida que sufrió Amelia en la relación con su pareja, que acabó asesinándola de un modo terrorífico. El doble objetivo, asumido por todos los poderes públicos, de tolerancia cero con la violencia machista y de erradicar lo más pronto posible esta terrible violencia que afecta a muchas mujeres, debe obligarnos a todos, ante este nuevo asesinato, a redoblar esfuerzos para conseguir más eficacia en el combate contra la violencia machista, mejores medios en la prevención y un mayor empoderamiento de las mujeres que sufren agresiones.
Al mismo tiempo, es necesario que el conjunto de la sociedad se conciencie plenamente sobre la gravedad de la violencia machista, y muestre su solidaridad y compañía a las mujeres que la padecen y, de modo particular, a los amigos y familiares de Amelia.
FUENTE: Ararteko del País Vasco, España.