Destrucción de espacios físicos, dificultades para recuperar inmuebles, y la restricción en los accesos a los Sitios de Memoria por parte de las Fuerzas Armadas y de Orden, son algunas de las dificultades detectadas por el Informe Anual sobre Derechos Humanos 2018, en su capítulo sobre “Sitios de Memoria y su contribución a la no repetición”.

El INDH recomienda devolver los recintos utilizados como centros de detención y tortura para habilitarlos como espacios de memoria, tal como lo sugirió la Comisión de Verdad y Reconciliación hace ya casi tres décadas, en virtud de los  compromisos y obligaciones adquiridos por el Estado de Chile.