El pasado miércoles 10 de abril se realizó el primer taller del proyecto Xa Oir Montevideo, en el cual se trabajó sobre las temáticas Derechos Humanos, Ambiente y Paisaje Sonoro.
El encuentro contó con la participación de referentes y educadores de las organizaciones: Obra San Vicente, Juventud para Cristo, Asociación Cristiana de Jóvenes, Centro CAIF «Las Hormiguitas» y de centros pertenecientes al INAU en distintos Municipios de Montevideo.
La preparación y presentación del taller estuvo a cargo de integrantes del Instituto de Promoción Económico Social del Uruguay (IPRU), la Defensoría del Vecino de Montevideo, docentes de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de la República y de integrantes de la ONG Vida Silvestre.
Durante el encuentro, se presentaron contenidos y dinámicas referentes a la temática de la contaminación sonora y sus principales características. Se analizó la construcción cultural de lo sonoro como fenómeno, se presentaron los conceptos claves entorno al ruido y las formas en que éste se genera y se consume en nuestras sociedades. A continuación también se analizaron los principales efectos de la contaminación sonora en la salud de las personas y en su entorno social.
El taller también contó con aportes desde la experiencia de integrantes de la ONG Vida Silvestre, en las dimensiones de la construcción ciudadana del fenómeno de la contaminación sonora, y las propuestas de monitoreo ambienta.
El proyecto y sus alcances
La iniciativa «Xa Oir Montevideo» se ha propuesto como objetivo el «fortalecer capacidades ciudadanas, integrando el uso de la XO en la promoción de derechos ambientales (en especial la contaminación sonora), en la ciudad de Montevideo».
El proyecto espera lograr que en los 8 Municipios de Montevideo se lleven adelante un total de 18 proyectos educativos, los cual generen mecanismos o instrumentos efectivos de participación ciudadana para el ejercicio de los derechos y deberes ambientales.
Para ello, el proyecto prevé la utilización de las computadoras de Plan Ceibal (ceibalitas) para realizar un monitoreo ambiental participativo, donde las XO sean una interfase, centralizadoras de todas las etapas del monitoreo, incluyendo la comunicación de resultados (en un formato similar a un mapa acústico de la ciudad), así como también una herramienta que facilite la creación de respuestas y acción a partir de lo monitoreado.
FUENTE: Defensoría del Vecino de Montevideo