Los periodistas deben contar con todas las garantías que les permitan ejercer su profesión sin amenazas ni agresiones.
Al conmemorarse este lunes 3 de mayo el Día Internacional de la Libertad de Prensa, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos considera que la libertad de expresión está en riesgo cuando existen espacios y acciones que atentan contra la actividad de los comunicadores.
Los ataques contra periodistas en nuestro país han hecho que los recientes años sean negros para ellos.
No debemos permitir que trabajen bajo la amenaza de la violencia y de las balas.
Como sociedad debemos mantener una actitud de rechazo a la violencia y de exigencia para evitar que el periodismo se convierta en el oficio más peligroso.
Los atentados contra los comunicadores son preocupantes, no sólo porque se trata de agravios a la integridad y vida de personas, sino porque la libertad de expresión es un bien social indispensable en la democracia.
El Estado mexicano tiene la obligación de investigar de manera exhaustiva el origen de los agravios, con el fin de que la autoridad judicial imponga a los responsables las sanciones que las leyes prevén.
Violación a la libertad de expresión, amenazas, intimidación, ejercicio indebido de la función pública, persecuciones, atetados, privación de la vida y desaparición forzada de persona son los principales hechos denunciados.
De 1999 a la fecha se han radicado en la CNDH 594 expedientes de queja por agravios a periodistas.
Esta Comisión Nacional ha emitido 20 Recomendaciones, de 2005 a la fecha y tiene registradas 10 desapariciones de periodistas.
De 2000 a la fecha se tienen registrados 61 homicidios de periodistas: cuatro en el 2000, cuatro en el 2001, tres en el 2002, uno en el 2003, cinco en el 2004, cuatro en el 2005, 10 en el 2006, cuatro en el 2007, 10 en el 2008, 12 en el 2009 y cuatro en lo que va del presente año.
Fuente. Tomado de la CNDH, ORGANISMO PÚBLICO AUTÓNOMO
