MÉXICO: Se requiere mayor protección a menores

El presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Raúl Plascencia Villanueva, hizo un llamado para no permanecer pasivos ante el grave panorama de maltrato infantil que prevalece en nuestro país.

Consideró que en esta materia hay pendientes y vacíos legales a pesar de que México ha firmado y ratificado tratados internacionales.

Plascencia Villanueva dijo que el problema ha crecido en forma exponencial propiciado por la falta de una estrategia adecuada capaz de hacerle frente.

Durante la presentación del Informe sobre Castigo Corporal y los Derechos Humanos de las Niñas, Niños y Adolescentes, de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH), también planteó que erradicar la violencia física y el maltrato infantil tiene que seguir siendo una responsabilidad inaplazable de todos los sectores y sobre todo de la sociedad civil.

“Ante esta realidad tenemos que sumar esfuerzos y superarla, porque no existe justificación para admitir ningún tipo de maltrato contra este sector de la población”, precisó el titular de la CNDH.

Para el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos es necesario buscar la forma de eliminar esta subcultura presente en la sociedad; no sólo la violencia física, sino también la agresión moral del infante, la cual destruye su percepción del mundo y su proyecto de vida.

“Es muy importante que haya una reforma legislativa pero más aún, hacer realidad lo que está previsto en el marco legal y que no permanezcamos todavía como testigos silentes ante una realidad de violencia por parte de adultos en contra de niños”, señalo Plascencia Villanueva.

La CNDH, agregó, se ha dado a la tarea de reforzar prácticamente todos sus programas institucionales de protección y promoción de los derechos humanos, especialmente los de prevención de la violencia hacia los niños.

En el informe, leído por el Comisionado de la CIDH, Paulo Sergio Pinheiro, se hace un llamado para que los países latinoamericanos actúen de forma inmediata, adaptando sus marcos normativos para establecer la prohibición legal del castigo corporal en la familia, la escuela y en general, en la comunidad, para proteger a niñas y niños.
 

FUENTE: CNDH México.