MÉXICO: La CNDH considera necesario unir esfuerzos para erradicar las agresiones que sufren los defensores de DDHH

Para la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, que preside el doctor Raúl Plascencia Villanueva, es necesario unir esfuerzos, gobierno, sociedad civil y los Ombudsman del país y tomar medidas urgentes para erradicar las agresiones a defensores y defensoras de derechos humanos.

La CNDH reconoce la importante labor que desempeñan las personas defensoras de derechos humanos al apoyar a diversos grupos en situación de vulnerabilidad y considera que se deben diseñar nuevas estrategias y programas para protegerlos.

Sostiene que las y los defensores de derechos humanos realizan una labor fundamental en la consolidación del Estado de Derecho y de una sociedad democrática, ya que coadyuvan con el deber del Estado de promover y proteger los derechos más esenciales de las personas, a través de las acciones que realizan en favor de la promoción y defensa de los mismos.

El peligro que entraña su labor los ubica en una situación de especial inseguridad, lo cual obliga al Estado a llevar a cabo acciones más efectivas en materia de protección. La CNDH destaca la situación de vulnerabilidad a que son expuestos estos ciudadanos, quienes durante el ejercicio de su labor se enfrentan a normas culturales que favorecen los prejuicios, la exclusión y el rechazo por parte
de las autoridades e, incluso, de la misma sociedad.

Mientras de 2005 a 2009 se solicitaron 16 medidas cautelares en favor de personas defensoras de derechos humanos, en el periodo 2010 a diciembre de 2013, la CNDH requirió en 34 ocasiones a la autoridad la protección de personas defensoras.

Similar tendencia se tuvo en el número de quejas, ya que mientras en el periodo de 2005 a 2009 fue de 107 quejas, en el periodo de 2010 a diciembre de 2013 fue casi del doble: 214 escritos de queja por agravios a luchadores civiles; conoció de 21 casos de homicidios de defensores y uno que se encuentra en calidad de desaparecido.

La mayoría de las denuncias fueron por violación al derecho a la seguridad jurídica, a la legalidad y a la integridad y seguridad personal. Estos defensores enfrentan situaciones críticas de violencia, amenazas, secuestro, tortura, detenciones arbitrarias e incluso privación de la vida.

Es tal su estado de indefensión que resulta necesario otorgarles una efectiva protección, para lograr una repercusión multiplicadora y positiva en la salvaguarda de los derechos de la sociedad.Por ello, la CNDH reafirma su apertura al diálogo con defensores integrantes de organizaciones civiles, activistas sociales individuales y con las autoridades encargadas de otorgarles protección.

Reitera su compromiso de monitorear, dar seguimiento y realizar investigaciones serias y contundentes respecto de la situación particular de las y los defensores, así como dar seguimiento puntual a cada una de las denunciadas presentadas con motivo de violaciones a sus derechos.

A fin de impedir que queden impunes estos ataques, la CNDH exige a éstos y a todos los ciudadanos, atención expedita y profesional por parte de los servidores públicos de los tres ámbitos de gobierno.

Es necesario que se actúe con la debida diligencia en la investigación y procesamiento de los responsables, pero principalmente en las medidas de prevención para proteger su importante labor.

 

FUENTE: Comisión Nacional de los Derechos Humanos de México