MÉXICO: Indispensable la coordinación para enfrentar violencia en Ciudad Juarez

La Comisión Nacional de los Derechos Humanos  considera que la reconstrucción del tejido social en Ciudad Juárez, Chihuahua, debe garantizar mayor participación de la sociedad en la planeación y una evaluación de las políticas públicas en materia de seguridad.
El ejercicio efectivo de los derechos humanos corresponde a todos por igual, por lo que no debe existir discriminación, marginación o intolerancia hacia grupos o personas en razón de su condición económica, ideológica o política.
Para este Organismo nacional, que encabeza Raúl Plascencia Villanueva, los consejos de la sociedad en materia de seguridad deben impulsar  políticas públicas que se orienten hacia la demanda y necesidades de la población.
Esto implica que ante delitos como homicidio, violaciones, secuestros y extorsiones, entre otros, haya un mapeo claro y medición específica que garanticen seguridad a la sociedad.
La exigencia de distintos grupos de la sociedad para que autoridades y servidores públicos cumplan con sus obligaciones, siempre dentro del marco de la ley, implica de igual manera un cambio de actitud en las personas, que también deben asumir sus responsabilidades.
Para ello la CNDH subraya que debe impulsarse una cultura de legalidad y el Estado de Derecho, donde la actuación de los servidores públicos se realice con pleno respeto a los derechos humanos.
La violencia que se sufre en Juárez también incluye el fenómeno de los feminicidios, en el que hay al menos 504 mujeres que han sido victimadas y abusadas sexualmente de manera brutal.
El clima que se vive en Juárez evidencia la falta de coordinación en materia de seguridad pública. La CNDH demanda el involucramiento de los tres niveles de gobierno en un compromiso común.
Dicha participación requiere una estrategia debidamente articulada donde cada quien tenga delimitadas sus funciones. Debe quedar claro el trabajo que corresponde a cada uno. Evaluar su participación y conocer si hay avance o no.
Mientras cada autoridad vaya por su lado, independientemente del esfuerzo que haga, será muy difícil revertir la situación de violencia en Juárez.

La CNDH mantiene, desde el pasado 31 de enero, contacto con los familiares de los 15 jóvenes fallecidos, para apoyarlos con servicios jurídicos y psicológicos; y da seguimiento a la recuperación de ocho personas lesionadas durante la masacre de la noche anterior.
Desde hace casi siete años la CNDH cuenta con una oficina en Ciudad Juárez que apoya a la sociedad para que haga valer sus derechos de la mejor manera.
Mediante su programa Províctima y el apoyo de una unidad móvil (Ombudsmóvil), la CNDH ha recorrido los domicilios de las víctimas en la colonia Villas de Salvárcar y los hospitales en los que están los lesionados.
En materia jurídica ha facilitado a los agraviados el acceso a los mecanismos de justicia proporcionándoles información sobre los legítimos derechos que les corresponden, para que los hagan efectivos.
Con el apoyo psicológico brinda los primeros auxilios en la etapa de crisis. En caso de requerirlo, canaliza a las víctimas a un centro de salud mental para su tratamiento y rehabilitación.
También da seguimiento a la evolución de los pacientes y solicita al personal médico que prescriba el tratamiento adecuado.
La CNDH reitera que su personal permanecerá en Ciudad Juárez el tiempo que sea necesario. Estará pendiente de  la evolución de los hechos y posteriormente emitirá la resolución que conforme a derecho corresponda.

Fuente: Tomado de la CNDH