El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, Ramón Custodio, abogó porque se dote a la policía hondureña de tecnología de punta que le permita reaccionar más rápidamente frente a los golpes de la delincuencia común y organizada y no seguir dando palos de ciego en materia de seguridad.
El Ombudsman hondureño indicó que el país está urgido de la creación de una política criminal del Estado para enfrentar la ola de criminalidad que vive el país. Advirtió que si no se crea una política criminal del Estado, se «continuará dando palos de ciego y malgastando los recursos del pueblo hondureño».
El defensor del pueblo es del criterio que las altas autoridades del país «no han querido sentarse para discutir un buen diagnóstico criminológico que indique por qué hay conducta criminal en unos hondureños y no en otros. Argumentó que se debe conocer «qué tipo de delitos se cometen y tipificar los delitos según las áreas del país donde se haga el estudio».
Custodio declaró que en Honduras debe prevalecer el criterio de oportunidad, que consiste en invertir en lo que se debe invertir. Precisó que Honduras debe tener una buena policía, bien organizada, bien dotada, no de más y más policía sino de tecnología de punta que permita tener cámaras televisivas y que permita tener reacciones rápidas frente a los golpes de la delincuencia.
Custodio hizo una analogía de la violencia delincuencial que afecta a Honduras con el arma 3.80 y concluyó que por una parte el sistema de justicia lo integran tres instituciones y el resultado es que el 80% de los delitos no son denunciados por las víctimas, el 80% de los casos denunciados no son investigados por la policía y el 80% de las órdenes de captura no son ejecutadas.
Comentó que cuando nos vemos reflejados en las valoraciones que hacen organismos especializados, Honduras ocupa los niveles mayores de inseguridad en Latinoamérica y en el mundo y en cuanto a la violencia, los mayores niveles de violencia.
Recordó que en el 2010, el país registró una tasa de 77 homicidios por cada 100,000 habitantes, que es casi nueve veces mayor a la tasa mundial establecida en 8.8. Si a lo anterior se suma el alto grado de corrupción que afecta, lamentablemente, a la policía, entonces, el resultado que tenemos es un batido de factores favorables a vivir en la situación en que vivimos, expresó.
Pese a lo anterior, el titular del CONADEH destacó que dentro de la policía hay jefes que se preocupan por adecentar a ese cuerpo de seguridad desde adentro. Mencionó el caso de Juan Carlos “El Tigre” Bonilla, que llegó a Copán, en el occidente de Honduras y empezó a limpiarla de policías corruptos, acción que merece el apoyo de sus jefes y de la población.
La violencia y la inseguridad, según Custodio, exige respuestas inmediatas y que todos los hondureños nos pongamos de acuerdo sobre qué clase de sociedad queremos y qué clase de país queremos tener. Agregó que el Presidente Lobo no debe seguir confundiendo al pueblo hondureño y lo mejor será que hable claro y qué es lo que quiere para este país.
Reiteró que el criterio de oportunidad nos dice que debemos invertir en lo que debemos invertir y que Honduras debe tener una buena policía bien organizada, bien dotada con tecnología de punta que permita tener cámaras televisivas, para hacerle frente a los golpes de la delincuencia con rapidez.
Lamentó que en la actual situación que vive el país, muchos policías, en el cumplimiento de su deber, sigan perdiendo la vida a manos de los delincuentes. “Debemos trabajar para que nuestra policía no siga pagando un costo en vidas, para que nuestra policía ande debidamente protegida, para que nuestros ciudadanos se sientan debidamente protegidos y no solamente los de la alta sociedad sino toda la sociedad en cada uno de sus estratos”, apuntó.
FUENTE: CONADEH. Honduras.