HONDURAS: Honduras con la peor educación de Centro América

 Pese a que Honduras destina gran parte del Producto Interno Bruto percapita para educación, los resultados indican que  los hondureños cuentan con la peor enseñanza de Centro América, ya que un alto porcentaje de alumnos llegan al tercer grado sin saber leer mucho menos sumar, restar o multiplicar.
 
Se estima que en el año 2000, Honduras “gasto” en educación pública, por cada estudiante, el 30% del Producto Interno Bruto percapita en educación secundaria y alrededor del 15% en primaria.
 
 
No obstante, los  exámenes estandarizados para determinar los resultados de la educación  en tercer grado, el país  registró el nivel de aprendizaje más bajo  de matemáticas y español, comparado con el resto de países centroamericanos.
 
De acuerdo al reporte, alrededor del 60%  de  los alumnos hondureños en tercer grado presentan bajos niveles de aprendizaje tanto de matemáticas como de español.
 
En el caso de El Salvador, el resultado reveló una menor inversión en educación en comparación a Honduras pero, al evaluar a los alumnos de tercer grado, el nivel de aprendizaje fue superior al 70% en matemáticas y de un 69% en español.
 
El titular del organismo humanitario, Ramón Custodio, expresó que la calidad de la educación hondureña debería ser la mejor de Centro América porque Honduras es el país que más “invierte” en la región.
 
Somos el país de Centro América que más “malgasta” el dinero en educación, porque el resultado de esa mala inversión es la pésima educación que reciben los niños y los jóvenes  hondureños, cuestionó.
 
Agregó que países como Costa Rica, El Salvador y hasta Nicaragua, con menor presupuesto, tienen mejor educación que Honduras, por lo que, se deduce, que “los hondureños gastamos mucho y rendimos poco en materia educativa”.
 
Se estima que en los últimos cinco años, Honduras “invirtió”, cerca de 98 mil millones de lempiras en una educación en la que apenas se imparten  alrededor cien días de clase al año y en el que más del 90% del presupuesto es destinado al pago de personal, según reveló el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH).
 
Según el organismo humanitario, el presupuesto destinado a la Secretaría de Educación, en los  últimos años, aún siendo muy alto en porcentaje es insuficiente para atender las necesidades educativas, especialmente en la formación del capital humano que el país necesita para su desarrollo.
 
Agregó que más del 90% del presupuesto se utiliza para el pago de personal, quedando muy poco para inversiones en el mejoramiento de la infraestructura y la formación y capacitación de los docentes.
 
Uno de los cuestionamientos del CONADEH es que si bien, como regla general, por cada cuarenta alumnos se designa un docente, de acuerdo al Currículo Nacional Básico,  el 62 % de los docentes de educación primaria enseñan en escuelas multigrados, lo que hace suponer una deficiente calidad en cuanto al tiempo de atención y dedicación a los  alumnos por grado.
 
En lo que respecta a los días de clase al año,  cuestionó que la ausencia del personal docente en el aula es significativa en los diferentes niveles educativos.
Señaló que en la tradicional educación básica, de los 200 días que se debe laborar, los docentes apenas cubren alrededor del 50% al año,  siendo este problema aún mayor en el área rural.
El organismo humanitario recomendó, al respecto, la necesidad  de aplicar los artículos referidos al desempeño docente, concerniente a la rendición de cuentas, según el  Estatuto del Docente y su Reglamento.
Custodio, manifestó que para invertir en lo que debemos invertir y con  criterio
de oportunidad, tenemos que ser honestos.
 
Mencionó como ejemplo de deshonestidad en el país, el Instituto Nacional de Previsión del Magisterio (INPREMA), institución a la que los mismos maestros, tanto los directivos como los que siguen y apoyan, lo han llevado a la quiebra.
 
Finalmente dijo que si tuviéramos una buena administración pública, nosotros tendríamos suficiente para invertir en seguridad, en defensa, en salud y en educación.

FUENTE: CONADEH. Honduras.