En Agosto la Procuraduría de los Derechos Humanos arriba a sus 23 años de labores, durante este recorrido ha tropezado con un sinnúmero de dificultades que van desde la persecución, exclusión, difamación, como de un eterno cerco presupuestario.
Claro está que para algunos la misión de la Institución del Defensor del Pueblo no es de su agrado, pues significa para ellos el obstáculo difícil de sopesar para continuar con sus tradicionales abusos y violaciones a la dignidad de los guatemaltecos.
Por ello, la Defensa, Promoción y Divulgación de los derechos humanos en el país ha constituido siempre un desafiante panorama, que la Procuraduría de los Derechos Humanos ha asumido con liderazgo y buen tino, desde 1987.
Recientemente el matutino Prensa Libre divulgó la encuesta de la empresa Vox Latina en donde los guatemaltecos la catalogan como: «La Institución de Vanguardia». El mencionado estudio de opinión reveló además que las mujeres, los pobres, los indígenas, así como los jóvenes y adolescentes son los grupos que mejor calificaron el trabajo de la institución, Y no cabe duda de ese dato pues, son esos sectores de la sociedad que con mayor énfasis atiende el Procurador de los Derechos Humanos, debido a su vulnerabilidad.
Por ello cada día que transcurre, cada servicio que la institución presta, cada problema que resuelve, cada rostro que puede hacer sonreír, son algunas de las prioridades y mística de los colaboradores de la institución, porque para el Procurador de los Derechos Humanos cada día cuenta para dignificar a todos los habitantes.
FUENTE: PDH de Guatemala.