La Defensoría del Pueblo propuso que la próxima ley de tierras regule la extranjerización y garantice que la misma sea un bien para la producción de alimentos.
El -Área de Ambiente- de la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Formosa, declaró la necesidad de que frente al recambio que se ha dado en el Congreso de la Nación, se pueda aprobar el Proyecto de la Ley de Tierras, siempre y cuando éste contemple situaciones que hacen a toda la Comunidad Organizada de nuestro País.
El Defensor del Pueblo de la Provincia, Dr. José Leonardo Gialluca, manifestó que es un tema central, debatido en foros internacionales, nacionales y en diferentes universidades de nuestro país, en donde se relaciona la tenencia de la tierra conjuntamente con la soberanía de los recursos naturales y la producción de alimentos y sus precios.
Desde el Organismo de la Constitución, se expreso a la Comisión de Asuntos Constitucionales, Legislación General y Agricultura de la Cámara Baja, que frente a la posibilidad de debatir y aprobar, regulando todo lo que hace a la tenencia de la tierra; se considere; en este contexto, que en la Argentina exista un Registro fidedigno que nos permita conocer con exactitud la cantidad de extensiones de tierras rurales que existen a la fecha y de ese número, cuantas hectáreas están en manos extranjeras.
Por otro lado, tal como lo vemos en el sur de nuestro país, en el NEA y el NOA, se deben establecer y fijar límites a las compras del total de las tierras no urbanas. También se propuso que; debe debatirse, que la compraventa de tierras no sea considerada una inversión y de esta manera resguardar un recurso natural no renovable.
Para comprender el marco dentro de los desafíos globales y en qué contexto se da la discusión de la Ley de Tierras en Argentina, desde la Defensoría del Pueblo, se expreso que debemos remitirnos a los últimos informes de la FAO, que hacen referencia a un proceso mundial de gran competencia por los recursos naturales y ya se habla de “la carrera por las tierras”. Todo esto se refiere a que existen acaparamientos por parte de extranjeros y una creciente tendencia al uso de la misma para diferentes fines, entre ellos para la producción de biocombustibles y no para la producción de alimentos.
Se da justamente tanto en la Argentina como en Brasil la adquisición de estos procesos de “acaparamiento de tierras”, y por ello es necesario frenar los procesos de “extranjerización” y evitar las grandes concentraciones, puesto que es para todos los consumidores, primordial que la Ley sobre el dominio, propiedad, posesión o tenencia de tierras en la Argentina, cumpla una función de Justicia Social para nuestra Comunidad Nacional y también para la Internacional, que no es otra que la de asegurarnos que la tierra nos garantice “stocks alimentarios importantes” y dejar de lado la especulación financiera o la adquisición de recursos naturales estratégicos que hacen corporaciones y ciudadanos provenientes del denominado primer mundo.
FUENTE: Defensoría del Pueblo de la Provincia de Formosa