FORMOSA: El Estado provincial nunca despojó a aborígenes de sus tierras

Se evidenció también quienes están a favor del progreso y otros, donde se alinea Félix Díaz que buscan, solamente su propio beneficio. El Defensor del Pueblo de la Provincia de Formosa, Dr. José Leonardo Gialluca, junto con los integrantes del -Área de Derechos Humanos y Grupos Minoritarios-, siguieron y analizaron en el día de ayer en la sede del Organismo de la Constitución, vía Internet, la Audiencia convocada por la C.S.J.N en la causa iniciada por un sector de la Comunidad Indígena Qom de la Primavera.

El Ombudsman Provincial, expresó, al concluir la misma, que el informe del Defensor Oficial de la Defensoría General de la Nación, Dr. Julián Horacio Languevin,  respecto a la situación actual de la Comunidad Indígena Qom; fue desmentido, con los informes del Estado Provincial, producido a través de sus representantes, quienes han demostrado la voluntad del Pueblo y Gobierno de respetar la convivencia pacífica con los aborígenes, lo cual está plasmado no solo en la Constitución Provincial sino en leyes dictadas en consecuencia, pioneras en la Argentina en cuanto al respeto por las tierras aborígenes, y también quedo desmentido, con el testimonio del hijo del Cacique Sanabria, quien detallo no solo las obras públicas realizadas, sino también los servicios públicos prestados actualmente a favor de la Comunidad Qom, como asimismo los beneficios sociales de los cuales gozan.

Abundó que, se evidenció la falta de Representatividad del Señor Félix  Díaz, toda vez que, no todos los legitimados por elecciones necesariamente representan la voz de todo un pueblo indígena como el Qom de La Primavera. Es clara, entonces la existencia de otro sector que no comparte la posición de Díaz y que por cuestiones inherentes a sus ancestrales costumbres tienen derecho a ser también escuchados, tal como lo reclamara Sanabria en su carácter de hijo del Cacique de dicha Comunidad.

Ello desnuda la necesidad de que toda mesa de diálogo, incluya a representantes de ambos sectores pues  cualquier conciliación respecto a las tierras necesita del compromiso de todos. Quedo demostrado también, que la Provincia de Formosa no ha realizado actos tendientes a despojar a los aborígenes de sus tierras. Las tierras en cuestión fueron otorgadas a la Comunidad y a los Criollos para su explotación.

También que el proyecto de ubicar al Instituto, en tierras que figuran a nombre de la familia Celia y que otrora fueron cedidos por la Comunidad  a estos, de modo alguno significó un avasallamiento a los derechos de los aborígenes, en primer término porque ellos no ocupaban esas tierras “no existía ningún aborigen en dicho territorio”, ello quedo claro no solo con el testimonio del Señor  Sanabria sino también con la exposición del Ingeniero- Agrimensor Florentín.

Es que el Instituto y el predio dispuesto para ello, tiende a favorecer la Educación Pública y no intereses de sectores políticos determinados y resulta útil tanto para impartir educación terciaria a los miembros de la Comunidad como a los Criollos en materia directamente relacionadas con los cuidados y explotación de sus tierras y el Ambiente.

Afirmó el Defensor que no resultó clara, de la exposición del Señor Félix Díaz, el fin de su lucha por más derechos aborígenes, máxime cuando quedo al descubierto que casi la totalidad de tierras que deberían trabajar, la arriendan a sojeros en su propio beneficio o de sus hijos.

Quedo al descubierto además, que Félix Díaz no tiene un discurso univoco de sus pretensiones; o quiere  la integración con los criollos y la población en general o quiere la disgregación, mediante maestros que enseñen solo su lengua, acceso a la laguna Blanca para la pesca y tierras para el cultivo y eventual arriendo, manteniendo sus ancestrales costumbres; o pretende incorporar a los sectores indígenas a la sociedad implicando con ello no solo el acceso a los beneficios sociales, sino además a una integración cultural que impone ciertas cesiones en beneficio de la Comunidad como lo haría cualquier habitante de la República .

En este punto fue claro el Sr. Sanabria en que, la idea de la Comunidad no es retroceder sino avanzar y permitir que las futuras generaciones tengan acceso no solo a la Educación Superior sino además a los beneficios que la misma trae aparejado. En otros términos, no se trata de tener más tierras para arrendar a los sojeros pese a que la misma Ley de Protección de tierras aborígenes lo prohíbe expresamente, tampoco se trata de una pelea estéril por un territorio nunca explotado, se trata de favorecer el desarrollo sustentable de la Comunidad y ese es el norte indicado por el Sr. Sanabria.

Que el conflicto no se supera con mas conflictos, por ello de los testimonios vertidos, se deduce que la tierra no tiene valor histórico, tiene valor como bien de uso, debemos preguntarnos: existe explotación racional de la tierra por parte de los miembros de la Comunidad, existe la necesidad de mayor territorio para proveer de alimentos mediante dicha explotación , no sería favorecida la comunidad con un Instituto como el que se promueve a fin no solo de formar profesionales sino permitirles un mayor desarrollo, existe necesidad de recurrir a medidas de fuerza  (cortes de ruta) sin antes evaluar los posibles beneficios, existe un verdadero ejercicio de Derechos de Pueblos Indígenas o una pretensión de acrecentar el conflicto para impedir el ejercicio de Políticas Públicas de Estado.

Hoy ha quedado al descubierto la visión siempre parcial de las cuestiones cuando incluyen Pueblos Indígenas, más aun cuando estos  estamentos o personas (que hoy acompañaban a Félix Díaz); solo comparten  unas horas con dichas Comunidades. Esperemos que la otra verdad, la claramente expresada por el Sr. Sanabria, miembro de la Comunidad también sea escuchada y considerada de ahora en adelante.

    

FUENTE: Defensoría del Pueblo de la Provincia de Formosa

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