En diez años podemos mejorar la situación del vital líquido si cambiamos los patrones de consumo.
El agua es un recurso natural que está íntimamente ligado a la vida, por ello resulta imprescindible cuidarla y llevar a cabo un consumo más inteligente el cual permita a esta generación participar en los retos ambientales y generar un futuro más prometedor en cuanto a los recursos hídricos, indicó Pedro Pliego Castil.
Señaló que ante la escasez del vital líquido en todas las regiones del país, más que racionarla, hay que ser inteligentes en su uso.
En el marco del «Día Mundial del Agua», auguró que cambiando los patrones de consumo y de uso del líquido, en diez años se podría mejorar su disposición en México, a fin de garantizar el acceso de las personas a este elemento natural estrechamente relacionado con la salud, y dijo que para ello es necesario cambiar la forma de consumirla, por ejemplo con la puesta en marcha de acciones tan simples como usar menos agua en el baño diario o en la disposición de nuestros desechos naturales, sin que esto demerite la calidad de vida.
El Presidente de Red Acción Ambiente, asociación que trabaja en colaboración con la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México, explicó que como parte de las acciones que la sociedad debe tener en cuenta para favorecer el ciclo natural del agua, está la reforestación, ya que los parques como el Nevado de Toluca y el Izta-Popo, proveen oxígeno al ambiente, regulan la temperatura y finalmente son fábricas de agua, por eso es importante reforestarlos.
Detalló que trabajan en zonas rurales de la entidad, en donde promueven tecnologías para el uso adecuado del líquido. Destacó que no es necesario tirar las aguas residuales domésticas al drenaje, sino tratarlas y reusarlas; asimismo, hay otras tecnologías accesibles que pueden ayudar a los campesinos a mejorar sus cosechas.
Asimismo, recordó que se pueden aplicar tecnologías para evitar el desperdicio en las labores del campo, donde se utiliza cerca del 75 por ciento del agua de nuestro país.
Explicó que una de las principales causas de pérdida del agua en el campo es la evaporación, por tanto, se deben incluir los árboles en el sistema de producción, aunque muchos campesinos los cortan porque la sombra disminuye el crecimiento de las plantas, pero una opción para contrarrestarla es el intercalado de siembra de árboles y de maíz.
Otras medidas son el riego por goteo, sistemas de acolchado o sistemas intensivos, entre otras, incluso la asociación civil funciona como enlace entre los campesinos y ecotecnólogos o agroecólogos, todo ello para favorecer un consumo más eficiente del vital líquido.
Finalmente reiteró su llamado para hacer un uso más inteligente del agua y hacer conciencia de lo afortunados que somos por contar con este elemento cuyo vínculo es muy estrecho con la vida, la salud, el bienestar y hasta el esparcimiento.
FUENTE: Comisión de los Derechos Humanos del Estado de México