Con un acto especial, celebrado en las instalaciones del Teatro Nacional de El Salvador, la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) conmemoró el pasado 14 de marzo el «XX Aniversario de su Creación», destacando el proceso y diversas etapas que ha tenido esta importante institución del Estado salvadoreño.
El evento estuvo presidido por el Procurador para la Defensa de los Derechos Humanos, Lic. Oscar Humberto Luna, el Magistrado de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, Dr. Florentín Meléndez; el Coordinador Residente del Sistema de Naciones Unidas en El Salvador, Sr. Robert Valent. Al mismo también asistieron como invitados especiales el Dr. Carlos Mauricio Molina Fonseca y el Dr. Agustín García Calderón, quienes fueron el primer Procurador y Procurador Adjunto respectivamente durante la gestión 1992-1995 . Además, estuvieron presentes miembros del Cuerpo Diplomático, representantes de organismos no gubernamentales y todo el personal de la Procuraduría.
En el evento se hizo entrega de reconocimientos a 22 empleados de diversas áreas de la Procuraduría que han permanecido trabajando y dando sus invaluables aportes desde el momento en que empezó a funcionar la institución nacional de derechos humanos.
La PDDH surgió hace dos décadas, como resultado de los Acuerdos de Paz suscritos en el Castillo de Chapultepec, Ciudad de México, el 16 de enero de 1992, a dicha institución se le confió el mandato de proteger, promover y educar en materia de derechos humanos. Desde su creación y funcionamiento la PDDH ha permanecido atenta del acompañamiento a las diversas necesidades de la población salvadoreña, ejerciendo un rol determinante en la fiscalización y contraloría de la actividad estatal.
Es importante recalcar también que durante estos veinte años la Procuraduría ha tenido que enfrentar a lo largo del tiempo muchas adversidades y luchar contra todo tipo de percepciones equivocadas en torno al trabajo de defensoría de derechos humanos que realiza la institución, pero afortunadamente, ha tendido a prevalecer entre los distintos sectores de la población una visión que hace del trabajo de tutela de los derechos y libertades esenciales, una especie de artesanado de la paz, de construcción de democracia y de inclaudicable promoción de la dignidad humana.
A través de estos 20 años de existencia la PDDH ha estado a cargo del Doctor Carlos Mauricio Molina Fonseca en el período de 1995-1992; seguidamente la Dra. Victoria Marina Velásquez de Avilés, fue la segunda Procuradora que tuvo la titularidad entre los años de 1995-1998. El tercer período de la PDDH estuvo a cargo del Lic. Eduardo Peñate Polanco, período 1998-2000, luego paso a manos del Dr. Marcos Alfredo valladares quien ocupo el cargo hasta el año 2001. El cuarto período de la Procuraduría estuvo a cargo de la Dra. Beatrice Alamanni de Carrillo, quien tuvo dos gestiones entre el año 2001 al 2007.
El quinto Procurador es el licenciado Oscar Humberto Luna, quien luego de haber sido reelecto para una segunda gestión, se ha caracterizado por impulsar aún más la descentralización de la institución, es por ello, que entre sus principales logros podemos señalar: la creación de Delegaciones Locales, la Escuela de Derechos Humanos y nuevos Departamentos, todos estos, apoyos claves para acercarse a los diferentes sectores de la población. También el trabajo del licenciado Luna ha permitido que la PDDH ostente cargos importantes como lo son la Presidencia del Consejo Centroamericano de Procuradores de Derechos Humanos (CCPDH), formar parte de la Federación Iberoamericana de Ombudsman (FIO) y del Comité Internacional de Coordinación de Instituciones Nacionales para la Promoción y Protección de los Derechos Humanos (CIC) de las Naciones Unidas, conjuntamente en la Red de las Américas con México, Argentina y Ecuador .
La administración del actual titular también ha permitido abrir espacios de análisis, atención y seguimiento a sectores que por años habían sido invisibilizados como lo son Pueblos Indígenas, personas con discapacidad, migrantes, personas que viven con VIH, adultos mayores, entre otros.
En la actividad conmemorativa el Procurador Luna reflexionó «dos décadas de creación deben servir para hacer un alto en el camino y auto- examinarnos críticamente a efecto, de comprometernos para que en el trabajo que desarrollamos personal y colectivamente lo hagamos cada vez mejor». El Procurador agregó que la fecha motiva a «subrayar que los retos y desafíos que ha enfrentado en estas dos décadas de fundación de la PDDH, demandan estar siempre a la altura de las legítimas expectativas de la ciudadanía, que es en última instancia, la verdadera razón de ser, y ese mismo espíritu deberá de animarnos a proseguir en ese trabajo misional, como resulta ser la defensa del débil frente al poder».
Con un total de 446 empleados distribuidos en oficinas en los catorce Departamentos del país, así como cuatro Delegaciones Locales y una Escuela de Derechos Humanos, la PDDH se perfila como una institución en constante cambio y dinámica, que se mantiene abierta a recibir, escuchar y abogar por soluciones reales a los grandes problemas que afectan a la mayoría de la población.
FUENTE: Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos de El Salvador