COLOMBIA: Erradicar la violencia contra las mujeres como uno de los mayores retos de la sociedad




La violencia contra las mujeres ha sido reconocida como una de las más extendidas y persistentes violaciones de los derechos humanos y libertades fundamentales. La violencia y sus impactos en las mujeres limitan total o parcialmente el ejercicio de su ciudadanía, afectan su calidad de vida e interfieren en el goce de sus otros derechos. La violencia contra las mujeres, constituye una expresión de la persistencia de la inequidad en las relaciones de poder entre hombres y mujeres, fundamentada en relaciones asimétricas y desiguales y que lesionan la integridad física, psicológica y/o sexual de las niñas y las mujeres. A través de la violencia se restringe y controla la capacidad de las mujeres y las niñas de decidir sobre si mismas, sobre su cuerpo, el ejercicio y goce de su sexualidad, y de la ciudadanía plena.

 

La violencia contra las mujeres con frecuencia se exacerba en el marco de la confrontación armada, aunque los conflictos armados generan peligros y amenazas, tanto para hombres como para mujeres; sus efectos afectan más a las mujeres por las condiciones históricas de discriminación y exclusión social. No podemos desconocer que la violencia tiene efectos desproporcionados en la vida de las mujeres, profundiza la pobreza, dificulta aún más el acceso a la justicia y reproduce la impunidad, que es, a su vez, causa y efecto de la violencia contra las mujeres, especialmente de la violencia sexual.

 

El uso de la violencia sexual como arma de guerra en el conflicto armado colombiano es cada vez más frecuente; ésta hace parte de un conjunto de prácticas comunes en el contexto de su degradación. El control físico de las mujeres, su retención, la violación, la prostitución y explotación sexual hacen parte de las prácticas violatorias de los derechos de las mujeres que los grupos armados ilegales deben abandonar de manera definitiva.

 

Hoy 25 de noviembre de 2009 “Día Internacional de la No Violencia contra la Mujer” la Defensoría del Pueblo hace un llamado para que la sociedad y las autoridades competentes del Estado enfrentemos en forma más eficaz la superación de la violencia contra las mujeres. El Estado colombiano ha ratificado a través de instrumentos como CEDAW y BELEM DO PARA su compromiso de implementar políticas y acciones orientadas a erradicar la discriminación la violencia contra las mujeres. De igual manera, cuenta con un marco normativo cualificado en la Ley 1257 de 2008 para desarrollar políticas y garantizar el adecuado tratamiento institucional a la violencia contra las mujeres tanto en el ámbito público como en el privado. Estos avances legislativos deben reflejarse de forma urgente en la vida cotidiana de las mujeres, es decir, en la garantía real de sus derechos.

 

La superación de la violencia y la discriminación contra las mujeres requiere de cambios en las valoraciones sociales que de esta problemática se tienen. La violencia contra las mujeres es una violación de los derechos humanos, profundiza las inequidades sociales, económicas, culturales y políticas y es uno de los obstáculos que hay que remover para el fortalecimiento de la democracia. Superarla es, por tanto, un reto para el país y la sociedad: las mujeres también son ciudadanas y como tal deben ser tratadas.

 

Fuente: Tomado de la Defensoría del Pueblo de la República de Colombia.