El Defensor del Pueblo, Volmar Pérez Ortíz, señaló que la declaratoria de la emergencia social, económica y ecológica decretada por el Gobierno Nacional para atender el impacto de la ola invernal en Colombia, debe permitir, en el menor tiempo posible, la puesta en marcha de soluciones adecuadas para 330 mil familias que han perdido sus viviendas, carecen de servicios públicos, enfrentan una progresiva escasez de alimentos y se encuentran incomunicadas por causa del invierno que ha deteriorado por lo menos 143 vías del país.
De acuerdo con la información allegada a nuestras oficinas regionales, la población afectada por el invierno, en especial aquellas en condición de debilidad manifiesta, como niños, ancianos, mujeres y personas discapacitadas, se han visto obligadas a vivir a la intemperie, exponiendo su salud por los riesgos de enfermedades que se han originado por la falta de agua potable y la escasez de alimentos en las zonas más afectadas por el fenómeno invernal.
El Defensor del Pueblo considera que “es necesario establecer disposiciones especiales en materia presupuestal, crediticia y fiscal, de dotación de viviendas y servicios públicos esenciales para lograr la recuperación de la actividad productiva y atender las necesidades básicas de las personas afectadas, así como lograr la reconstrucción y rehabilitación de las zonas afectadas por causa del invierno”, sostuvo el Defensor del Pueblo.
En ese sentido, el Defensor del Pueblo, Volmar Pérez, insta a las autoridades competentes a priorizar sus estrategias para atender la emergencia invernal y privilegiar la atención humanitaria, para la cual es necesario adoptar planes de contingencia en materia de vivienda y de garantía al derecho a la alimentación, la recuperación de las redes eléctricas rurales y urbanas en las zonas afectadas, la rehabilitación de las plantas físicas de las escuelas, malla vial y obras de infraestructura.
“La puesta en marcha de estas actividades implica la de garantizar las condiciones de vida de las personas afectadas en términos de satisfacción de los derechos humanos”, indicó el Defensor del Pueblo.
Solidaridad con los damnificados
El Defensor del Pueblo, Volmar Pérez, igualmente, expresó que donará un día de su sueldo en un gesto de solidaridad hacia las familias damnificadas del invierno e invitó a los directivos de todas las entidades del Estado a hacer lo mismo.
El Defensor del Pueblo, Volmar Pérez, manifestó también su solidaridad a los familiares de las 124 victimas que quedaron sepultadas por una avalancha de 50.000 metros cúbicos de tierra que se precipitó sobre un conjunto de viviendas del barrio La Gabriela en el municipio de Bello, localizado en el nordeste del Departamento de Antioquia y que es consecuencia de la intensidad de las lluvias que azota a esa región del país.
Así mismo, el Defensor del Pueblo consideró que es necesario que los monitoreos de la ola invernal no estén a cargo sólo del IDEAM, sino que en estos mecanismos de prevención se involucre a los entes territoriales, las corporaciones autónomas regionales y las comunidades, las cuales deben reportar situaciones que permita prevenir desastres como el alud de tierra que se presentó el pasado domingo en el barrio La Gabriela, que sepultó a 124 personas y destruyó cerca de 30 casas de esa localidad.
FUENTE: Defensoría del Pueblo de Colombia.