Es necesario que se modifique el artículo 209 del Código Penal del Estado, referente a la violación en menores de 14 años, con el fin de evitar que cada vez más jóvenes inocentes terminen en la cárcel, purgando condenas de hasta 35 años.
Lo anterior manifestó Roberto Chapula de la Mora, presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Colima (CDHEC), luego de que el gremio de abogados reveló que algunas madres de familia tratan de sacar dinero a los novios de sus hijas –menores de 14-, tras descubrir que sostienen relaciones sexuales con éstas.
Sin embargo, para el ombudsman la situación se debe analizar de fondo, con la finalidad de modificar dicho artículo, donde se precisa que a quien tenga cópula con personas menores de 14 años o sin capacidad para comprender el significado del hecho, se le impondrá de 25 a 35 años de prisión, aún cuando el acto sexual haya sido sin violencia física o moral y con el consentimiento de la víctima.
Delito por el que, a decir de Chapula, se impone una sanción más severa que por homicidio simple, donde la pena va de 15 a 25 años de prisión. Dijo que quizá en su inicio este precepto fue adecuado pero ahora se está viendo que el resultado no se detiene, pues siguen las relaciones de noviazgo entre menores de 13 o 14 años, por lo que «hay cantidad de jóvenes que están purgando penas arriba de 25 años», de manera injusta.
Y es que para el titular de la CDHEC, si bien este delito se debe sancionar, sugiere que se deberían tomar en cuenta las circunstancias que están rodeando el hecho. Ya que tomando en cuenta la evolución social, así como la evolución física y mental de los jóvenes, este tema se tiene que ver no como política criminal, sino como problemas de carácter personal y familiar.
Es por ello que exhortó a las autoridades del Congreso del Estado y al titular del Ejecutivo estatal, para que se convoque a un foro donde participen los magistrados del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, así como los proyectistas, actuarios, jueces —penales, civiles, mixtos y familiares—, secretarios de acuerdos, agentes del ministerio público —investigadores y adscritos—, la Facultad de Derecho y barras y colegios de abogado, con la finalidad de que se modifique o se le agreguen algunas variantes a esa figura jurídica, que ahora «de manera injusta», impone «penas inusitadas».
Penas con las que si el joven era inocente, así fuera brillante en la escuela, «se le destruye la mitad de su vida», cuando a la víctima eso no le pasa, porque hubo consentimiento.
Finalmente, Roberto Chapula sugirió que mientras se modifica ese artículo, en casa se debe educar a las menores y tener diálogo con ellas en relación a su sexualidad, así también y hablar con los varones, para que eviten dichos problemas.
FUENTE: Comisión Estatal de Derechos Humanos de Colima