Este jueves 25 de abril se publicó en el Diario Oficial la Ley 21.154 que designa al Instituto Nacional de Derechos Humanos como el Mecanismo Nacional de Prevención Contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes (MNPT).
Dicha norma se sitúa en un contexto mundial orientado a establecer mecanismos efectivos de prevención y protección frente a situaciones de tortura, en lugares donde se pudieran encontrar personas privadas de su libertad, reservadas a la vigilancia del Estado o con su consentimiento expreso o tácito.
El antecedente que gatilla este hito es la aprobación del Protocolo Facultativo a la Convención de las Naciones Unidas contra la Tortura por parte del Estado de Chile, que se publicó en 2009, exigiendo dicho instrumento que a más tardar un año después se su entrada en vigor se debía instalar un mecanismo como el que hoy se regula en esta nueva ley. Por tanto, hoy se cumple un compromiso con el que nuestro país estaba al debe desde hace casi una década.
La designación de radicación del Mecanismo Nacional de Prevención contra la Tortura en el INDH cumple con los requisitos establecidos en los Principios de Paris sobre el estatuto de las instituciones nacionales de promoción y protección de los derechos humanos.
Se destaca entre las principales funciones que desarrollará el MNPT, la de examinar periódicamente las condiciones de las personas privadas de libertad y el trato que reciben, así como realizar visitas periódicas preventivas no programadas y de monitoreo a los lugares de privación de libertad. Asimismo, podrá el MNPT realizar recomendaciones a las autoridades competentes del servicio responsable del lugar de privación de libertad, o al representante legal de las personas jurídicas de derecho privado.
El Comité de Expertos/as será integrado por siete miembros elegidos/as por el Consejo del Instituto Nacional de Derechos Humanos y seleccionados/as por concurso público, efectuado por el Sistema de Alta Dirección Pública del Servicio Civil.
La ley establece también el deber de colaboración de las autoridades competentes del Estado, que deberán considerar las recomendaciones e informes elaborados por el Comité, entablando un diálogo acerca de las posibles medidas de aplicación.
Respecto de la promulgación de la legislación, Consuelo Contreras, directora del INDH, sostuvo que “valoramos el esfuerzo que hizo el Estado de Chile para combatir este crimen, dado que la tortura es una realidad que persiste en Chile en lugares de detención y al interior de instituciones penales o de privación de libertad”.
La Directora del INDH afirmó también que “valoramos el apoyo transversal que este proyecto tuvo por parte del Gobierno y del Congreso como órganos colegisladores. Tras dos años de tramitación, con una importante presencia e incidencia legislativa del INDH, fue despachada una ley que permite avanzar en los compromisos internacionales adquiridos por el Estado en materia de prevención de la tortura”.
A lo anterior, Rodrigo Bustos, Jefe de la Unidad Jurídica Judicial del INDH, complementó que “al visibilizar y realizarse un monitoreo periódico de los espacios y lugares destinados a mantener personas privadas de libertad mediante el acceso de observadores independientes, se pueden prevenir situaciones que vulneren la integridad psíquica o física”.
“Destacamos el concepto amplio de lugares de privación de libertad que regula la ley puesto que ello permitirá un desarrollo pleno de las funciones de los expertos y expertas del Mecanismo Nacional de prevención contra la Tortura”, agregó Bustos.
Cabe recordar que la tortura es una de las más graves violaciones a los derechos humanos, cuya prohibición es absoluta tanto en los ordenamientos internacionales como en la legislación nacional.
El INDH, además de haber realizado desde sus inicios un monitoreo de las condiciones de detención en diferentes lugares de privación de libertad, ha realizado reiteradas recomendaciones respecto de la necesidad de investigar, sancionar y reparar a las víctimas de los casos de tortura ocurridos en dictadura, así como los que han seguido ocurriendo en contexto de democracia.
También desde hace dos años el INDH ha coordinado una mesa interinstitucional que ha procurado que diversos organismos del Estado puedan aunar sus esfuerzos en estas materias y adoptar medidas para mejorar los registros estadísticos de estos casos, revisar los protocolos de actuación y fortalecer las capacitaciones a sus funcionarios y funcionarias.