El Defensor del Pueblo, Rolando Villena, afirmó hoy que en Bolivia las niñas y las adolescentes son el grupo más vulnerable de la sociedad ya que se encuentran afectadas de manera más frecuente, sistemática y grave por la violencia, la discriminación y la falta de protección.
«Si consideramos los datos sobre violencia sexual, más del 90% de las agresiones tiene como víctimas a niñas y adolescentes mujeres entre 7 y 15 años, mientras que en los casos de infanticidios, la mayor cantidad de víctimas corresponde a niñas y niños entre 0 y 6 años», indicó el Defensor, quien lamentó que el peligro de las niñas de ser agredidas sexualmente comienza desde su más tierna infancia.
De acuerdo a la autoridad, en Bolivia impera un modelo cultural adulto centrista que concibe a la niña, niño y adolescente como un objeto y no como un sujeto de derechos, negándoseles la capacidad de ejercerlos e incluso de demandarlos. «La sociedad considera que las niñas, niños y aún adolescentes, son siempre propiedad de las y los adultos y sólo pueden ejercer sus derechos a través de personas mayores, por eso su opinión no se toma en cuenta, sus reclamos no son escuchados y ni siquiera la violencia que sufren genera en el Estado la reacción ni en la sociedad una toma de conciencia», indicó.
Villena explicó que en el país se estima que el 83% de niños, niñas y adolescentes sufren algún tipo de maltrato en el interior de su propio núcleo familiar y, aunque es transversal, la violencia y el riesgo son más significativos y recurrentes contra las niñas. «Además del adulto centrismo, las niñas y adolescentes mujeres son golpeadas duramente por el modelo patriarcal imperante y por la discriminación y el machismo, por lo que podemos evidenciar que sufren de maltrato por sus padres, hermanos, familiares y extraños, e inclusive por sus propias madres», manifestó.
«Todavía podemos escuchar en algunas familias que los padres se lamentan por tener una hija mujer y que se tenga a las hijas como «servidoras» de sus hermanos varones o que ellas dejen de estudiar para cuidar a sus hermanos. En nuestra cultura, las hijas mujeres deben asumir el papel de madre cuando ésta falta», señaló.
En el mundo, dijo, se estima que el 20% de las mujeres sufren algún tipo de violencia sexual antes de cumplir los 18 años; en Bolivia esa cifra se eleva a 34%, lo que lo coloca como uno de los países del mundo más inseguros para las niñas y las adolescentes en términos de violencia sexual. «Por su naturaleza y crueldad, los casos de violencia sexual contra niñas tienen un alto grado de sensibilidad social pero, paradójicamente, luego del hecho no se asume ninguna medida de prevención y los casos siguen sucediendo», reclamó.
En relación a los datos que presentó la pasada semana, la autoridad dijo que en 2013 se presentaron 341 casos de violaciones a niñas entre 0 y 12 años de acuerdo a datos de la FELCV. «Para el 2014, los medios de comunicación y nuestras propias denuncias recibidas nos dan un dato de 326 casos, pero sin duda que esa cifra será mayor cuando recibamos las cifras que proporcione la misma FELCV, que recibe casos que no siempre son de conocimiento público. Además hay que tener en cuenta la investigación realizada por la ONG Misión Justicia y Paz, que estima que en Bolivia sólo el 5% de las violaciones se denuncia», señaló.
Las niñas y las adolescentes, acotó, son además las más afectadas por la trata y tráfico de personas, por el bullying y el acoso cibernético. «De acuerdo a las investigaciones iniciales especializadas en la materia, en las unidades educativas las más afectadas por el acoso escolar también son las niñas y las adolescentes».
Villena tras remarcar que este es un problema tan grave como la violencia hacia las mujeres adultas, «al que estamos enfrentando como sociedad y como Estado con leyes, recursos y políticas», indicó que el caso de las niñas y las adolescentes mujeres se vuelve más grave porque, además de no existir políticas públicas ni mecanismos de prevención y protección adecuados, éstos sólo generan los reclamos momentáneos y «las congojas de circunstancia» y cuando dejan de tener repercusión mediática desaparecen de la agenda pública.
«Hemos convocado a un acuerdo nacional por los derechos humanos y en los próximos días vamos a reactivar este llamado. Yo creo que el acuerdo debe empezar por considerar el tema de las niñas, niños y adolescentes», finalizó.
FUENTE: Defensoría del Pueblo del Estado Plurinacional de Bolivia