El Ombudsman, Gustavo Rodríguez Junquera, exhorto a unir voluntades y convicciones, para generar nuevas y mejores estrategias para garantizar la seguridad alimentaria de las mujeres.
Lo anterior, al dar la bienvenida a los participantes del Foro «El Derecho de las Mujeres a la Seguridad Alimentaria», organizado por la CNDH y la Procuraduría de los Derechos Humanos en el Estado de Guanajuato.
Consideró que todas las acciones y estrategias para lograr la seguridad alimentaria sustentable, deben abordar el problema de su limitado acceso a los recursos productivos; el escaso acceso de la mujer a los recursos y su insuficiente poder adquisitivo, que devienen de factores sociales, económicos y culturales que le relegan en menoscabo de su desarrollo y el de la propia sociedad en su conjunto.
En este sentido, dijo él Ombudsman que es indispensable promover y realizar todos los estudios y diagnósticos que resulten necesarios sobre género, para comprender esta problemática y facultar a la mujer, facilitando su plena participación en las estrategias de desarrollo rural y seguridad alimentaria.
Para enfrentar estas limitantes se requieren de políticas específicas, así como una especial consideración hacia las necesidades de las mujeres cabeza de familia.
Recordó que la seguridad alimentaria ha sido definida por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), no solo en función del acceso a los alimentos y la disponibilidad de éstos, sino también de la distribución de recursos para producirlos, así como de la generación del poder adquisitivo para comprarlos ahí donde no se producen.
Dijo que de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, las mujeres producen entre el 60 y el 80 por ciento de los alimentos de los países en desarrollo y la mitad de los de todo el mundo y solo de manera reciente se reconoció su papel clave como productoras y suministradoras de alimentos y su decisiva contribución a la seguridad alimentaria del hogar.
Los estudios de la FAO confirman que la mujer es pilar fundamental de la agricultura de pequeña escala, del trabajo campesino y de la subsistencia familiar, sin embargo tiene mayores dificultades que el hombre para acceder a recursos tales como la tierra y el crédito, los insumos y servicios que aumentan la productividad.
FUENTE: Procuraduría de Derechos Humanos del Estado de Guanajuato