Este 11 de octubre la Representación Departamental de la Defensoría del Pueblo brindará una conferencia de prensa en la que se entregará un importante estudio acerca la situación de las mujeres con discapacidad. Esta actividad se llevará a cabo a las 16:00 en instalaciones de la Representación Defensorial (Calle Libertad 321).
La Democracia con rostro de mujer
A todas ellas, a la mujeres trabajadoras, indígenas, campesinas, líderes, autoridades, dirigentas, autoridades, amas de casa, artistas, empresarias, comerciantes, profesionales que le han dado un rostro social y humano a las luchas sociales, como el retorno a la democracia, que cumplió 29 años de vida, es nuestra democracia con rostro de mujer.
Cada 11 de Octubre se conmemora el Día de la Mujer boliviana en homenaje a Adela Zamudio, poetisa que, debido a la discriminación por el hecho de ser mujer, utilizó un pseudónimo para escribir en público y no ser sancionada por ello. Contribuyó a la lucha por el reconocimiento de los derechos de las mujeres.
No obstante, los grandes aportes de Bartolina Sisa, Gregoria Apaza, Micaela Bastida y otras combativas mujeres, hicieron cambiar la historia de nuestro país. Nuestro reconocimiento a ellas y salutación a todas las mujeres del país.
La Representación Departamental del Defensor del Pueblo interpela a la sociedad y hace recuerdo de los derechos humanos de las mujeres y de los instrumentos internacionales específicos sobre esos derechos:
Realidades que duelen
A pesar de los avances, todavía las mujeres registran los índices más altos de vulneración de derechos, más que el resto de poblaciones, colectivos y grupos.
Las mujeres constituyen más de la mitad de la población total y concentran los niveles más altos de discriminación en todas las esferas.
Están más alejadas de los empleos productivos y con ingresos dignos.
La mayoría de las mujeres no goza de seguridad social dejando el cuidado de su vejez en un alto riesgo.
La violencia y acoso sexual afecta principalmente a mujeres, al igual que la trata y el tráfico con fines de explotación sexual.
El abandono de las mujeres por parte de sus parejas, incide en la reducción de sus condiciones de vida saludable porque debe multiplicar sus esfuerzos para satisfacer la canasta básica familiar como jefa de hogar.
La pobreza se concentra en las mujeres.
La mujer no puede acceder a la justicia al igual que los hombres debido a barreras de género, situación que se empeora si es pobre e indígena.
La prioridad que la mayoría de las políticas públicas da a las mujeres, esta centrada en cuanto es madre.
Las normas son sexistas y/o ambiguas generalizándolas con el hombre, razón por la que discriminan a las mujeres.
El acoso político contra las mujeres, y la falta de sanción de estas conductas contra ellas, impide el ejercicio de los derechos políticos de las mujeres.
La mujer vive más que el hombre pero por las discriminaciones de género, viven pobres.
El cáncer cérvico uterino, altamente prevenible, juntamente al cáncer de mama, es una de las primeras causas de muerte de las mujeres.
El abandono escolar se concentra en mujeres.
La Representación Departamental de la Defensoría del Pueblo invita a la ciudadanía a romper ciertos esquemas, taras y modelos culturales y tradicionales de considerar a la mujer solo como un objeto, que no vale su palabra (solo vale la palabra de hombre), que se subestima por esa misma razón de ser mujer, que se la malentiende por esa razón de ser mujer, que se la maltrata por esa misma razón de ser mujer.
Lo cotidiano son las discriminaciones, las injusticias, el desequilibrio, y muchas otras taras sociales, que deben ser erradicas por completo. Se trata de enseñar a mirar de nuevo, enseñar a dejar atrás la miopía en la que sólo lo masculino vale y los valores deben ser hechos a esa medida. Pero estamos avanzando, esta afirmación aún no es contundente, pero tampoco deja lugar a interrogante.
Aún queda largo trecho y muchos rivales de carne y hueso, conceptuales, de valores, de miradas que quieren permanecer vigentes; sin embargo se está avanzando en la construcción de una cultura de derechos humanos, pero con rostro de mujer.
En estos 29 años de recuperación de la democracia, la mujer aporta a la vivencia democrática con responsabilidad, de mantenerla, de recrearla, de fortalecerla todos los días en cada uno de nuestros actos, pensamientos y visiones.
Ya se tiene el Estado democrático, pero se necesita que se lo sienta, se lo viva se lo disfrute y se lo respete, se hace necesario continuar trabajando en esta responsabilidad haciendo un Estado democrático a la medida de nuestras necesidades, y no usando la democracia hacia nuestras convicciones, hacia nuestras conveniencias, como generalmente se acostumbra.
Una democracia con rostro de mujer, y ese rostro plurinacional.
A todas ellas, a las más de cinco millones de mujeres de Bolivia, nuestro abrazo sincero y reconocimiento por sus luchas, por sus lágrimas, por sus esfuerzos, por sus iniciativas, por enseñarnos el camino hacia una sociedad más justa, más honesta, más digna, más noble, y más libre.
FUENTE: Defensoría del Pueblo de Bolivia