COSTA RICA: Inadecuada canalización de aguas de lluvia pone en riesgo salud y viviendas

La inadecuada canalización de aguas pluviales (generadas por las lluvias) que pone en riesgo, salud, terrenos y viviendas, se ha convertido en una constante en las denuncias que recibe la Defensoría de los Habitantes en esta época del año.

Habitantes de diferentes zonas del país solicitan la intervención de la Defensoría por considerar que las Municipalidades no cuentan con un sistema de alcantarillado eficaz, o no realizan una apropiada fiscalización en la construcción de viviendas u otras obras constructivas dentro del cantón.

Para la Defensoría es indiscutible que las aguas pluviales deben ser colectadas y canalizadas adecuadamente, con el propósito de evitar que se generen procesos erosivos o inundaciones en propiedades, las cuales podrían ocasionar daño al ambiente y afectación a la calidad de vida de la población. Para una disposición correcta de las aguas se requiere tanto de la participación de las y los habitantes como de los gobiernos locales y el Ministerio de Salud.

Según la Ley General de Salud, es obligación de las personas propietarias que sus viviendas cuenten con medios de saneamiento básico, tales como, sistemas adecuados de eliminación de excretas, aguas negras, servidas y pluviales, aprobados por el Ministerio de Salud. Por otra parte, corresponde a las municipalidades administrar los sistemas pluviales de canalización pública y velar por su adecuado funcionamiento.

Atención limitada

En el estudio de estos casos, la Defensoría de los Habitantes ha podido constatar que la actuación de las entidades competentes es en muchas ocasiones limitada y lenta, tolerando en el tiempo de actividades o situaciones irregulares que deben ser erradicadas definitivamente. Además, se identificó la necesidad de exhortar a las y los propietarios a cumplir con las normativas vigentes.

Por ejemplo, una habitante denuncia el grave daño que su vivienda tiene, con la consecuente afectación de su calidad de vida, ante la inexistente canalización de las aguas que hiciera una construcción vecina. Asimismo, la Defensoría atendió un caso donde el alcantarillado pluvial de un barrio en el Roble de Puntarenas no contaba con los desniveles adecuados, lo cual provoca que las aguas de lluvia no discurran como deberían, formándose en el sector gran cantidad de aguas estancadas que ocasionan malos olores, mosquitos y barro en las alcantarillas. Es así que ambos casos demuestran la falta de cumplimiento de la normativa tanto de un habitante que afecta a otro, y en otro caso la inacción municipal.

“El problema que enfrentan muchos habitantes del país con respecto al inadecuado tratamiento de las aguas provocadas por las lluvias requiere de una intervención coordinada entre Municipalidades, Ministerio de Salud y las y los dueños de viviendas. Se deben tomar acciones preventivas para evitar el riesgo o daño a las propiedades y sobre todo a la salud de los habitantes”, dijo Montserrat Solano Carboni, Defensora de los Habitantes.

Si algún habitante considera que se está viendo afectado por la incorrecta disposición de las aguas producidas por las lluvias, debe acudir ya sea a la Municipalidad del cantón o al Ministerio de Salud (como ente rector en la materia), para que se solicite una inspección y se giren las órdenes correspondientes. Si el problema es entre particulares (como por ejemplo vecinos) se acude al Ministerio de Salud, y si es con respecto a la canalización en vía pública a la Municipalidad local.

A todo ello se suma los problemas en los sistemas de alcantarillado que no dan abasto porque están saturados de basura o por falta de acciones preventiva de educación y limpieza.

FUENTE: La Defensoría de los Habitantes de la República de Costa Rica