Ante el incremento del fenómeno de maltrato y acoso escolar denominado bullying, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos lleva a cabo un programa en el que propicia la cultura de la denuncia a fin de combatir esta práctica antisocial.
Estos actos se han ido generalizando en las últimas décadas y lastiman de manera muy seria a la niñez mexicana; afectan al 40% de los alumnos de primaria y secundaria en instituciones públicas y privadas de todo el país. Van desde la violencia física, psicológica o emocional hasta el maltrato sexual, la negligencia de la autoridad y la violencia cibernética, una de las formas cada día más frecuente.
Por ello, la Comisión Nacional impulsa la colaboración de instituciones y la propia familia para encontrar la forma de prevenir el bullying y evitar que esos niños puedan convertirse en víctimas. Invita a la sociedad a denunciar estos hechos y se encuentra lista para recibir las quejas y orientar a maestros y padres de familia. Se trata de coadyuvar para liberar a la escuela de un entorno preocupante de violencia, ya que es la institución que está formando a los mexicanos del mañana y debe ser generadora de armonía social y no de intimidación.
El Organismo nacional sostiene que en estos casos también es importante aplicar la cultura de la legalidad y la cultura de los deberes; los niños tienen derecho a recibir una educación de calidad y libre de violencia, pero también tienen deberes, el deber de respetar a los compañeros, a los padres de familia, a los maestros y a las autoridades educativas.
En la medida que logremos que esa violencia vaya disminuyendo vamos a tener una sociedad mejor y ahí es donde se verá el cambio real que necesita nuestro país. La escuela debe de ser la formadora de un niño no en un esquema de sumisión, sino de responsabilidad.
FUENTE: Comisión Nacional de Derechos Humanos de México