1° de Mayo – Día de los/as Trabajadores/as

El 1º de Mayo de 1886 fue convocada una huelga general en Estados Unidos, en reclamo por la reducción de la jornada de trabajo a ocho horas diarias (ocho horas de trabajo, ocho horas de recreación y cultura, ocho horas de descanso). Las condiciones laborales de la clase obrera eran deplorables. Niños, niñas, mujeres y hombres eran explotados en jornadas de hasta dieciocho horas diarias sin descanso semanal y con remuneraciones ínfimas. La Revolución Industrial avanzaba con su tecnología y su injusticia, y con ella Estados Unidos comenzaba a crecer como país industrializado atrayendo a miles de obreros de Europa que buscaban mejores condiciones de trabajo. Las jornadas de huelgas que empezaron ese 1° de Mayo se repitieron en las grandes ciudades norteamericanas, manifestaciones que fueron reprimidas por la Policía. En Chicago, se enjuició a ocho huelguistas anarquistas, que fueron condenados y ejecutados en la horca en 1887. A ellos se los llamó “Mártires de Chicago”, por la injusta condena realizada en esa ciudad norteamericana.
Así, el 1° de Mayo es una fecha reivindicativa y de homenaje a estos Mártires de Chicago, y se conmemora en casi todo el mundo como día de lucha por los derechos a trabajar y vivir dignamente.
Si bien desde 1886 a la fecha se han sancionado normas en post de proteger a niños y niñas, declarando la ilegalidad del trabajo infantil, y se ha avanzado en la protección de derechos de los trabajadores y trabajadoras, aún hoy, a 125 años de la ejecución de los trabajadores anarquistas, siguen predominando la explotación y opresión de millones de trabajadores y trabajadoras del mundo. Con jornadas de 12 horas en grandes fábricas industriales, hasta 18 horas en talleres textiles clandestinos, con salarios que no alcanzan para cubrir las necesidades básicas de las familias, leyes que atentan contra la organización de los y las obreras, con salarios diferenciados entre hombres y mujeres y en medio de una crisis económica internacional, la clase trabajadora del mundo sigue reclamando y defendiendo sus derechos, y las mujeres siguen de pie pidiendo «a igual trabajo, igual salario».
En homenaje a los mártires de Chicago y a los/as millones de trabajadores/as del mundo, conmemoramos una vez más este día de lucha.