El Delegado para los Derechos de la Población Desplazada de la Defensoría del Pueblo, Mauricio Vesga; la Embajadora de Suecia en Colombia, Marie Andersson de Frutos, y la representante de la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), Terri Morel, realizaron una visita humanitaria a la vereda Granizal, del municipio de Bello (Antioquia) en la que pudieron constatar la difícil situación en la que viven cerca de 4.700 familias víctimas de desplazamiento forzado del Valle de Aburrá.
Durante su recorrido, los miembros de la delegación visitaron la Casa de los Derechos, una estrategia que funciona desde 2009 y atiende a la población vulnerable de la zona, en el marco de un convenio entre la Defensoría del Pueblo y Acnur, en la que se reunieron con líderes comunitarios para evaluar el avance de los proyectos que adelantan las entidades.
La estrategia de la Casa de los Derechos es un referente en la zona, ya que descentraliza los servicios de la Defensoría del Pueblo y permite apoyar a una población cercana a los 19.000 habitantes con asesoría jurídica para la exigibilidad de sus derechos.
Por último, la Defensoría destacó el aporte del gobierno sueco para mejorar la situación de derechos humanos en el país, con inversiones anuales que rondan los 20 millones de dólares dirigidas esencialmente a la población desplazada y a fortalecer la capacidad del Estado para buscar soluciones sostenibles para enfrentar este fenómeno.
FUENTE: Defensoría del Pueblo de la República de Colombia