Funcionarios de la Oficina Regional de Bocas del Toro acudieron al Centro de Rehabilitación, con el propósito de atender la solicitud de las personas privadas de libertad quienes manifestaron su molestia por una serie de situaciones que se han registrado en ese lugar y por la cual se iban a declarar en huelga e iban a tomar otras medidas de presión.
Durante el encuentro los privados de libertad rechazaron los señalamientos sobre vender la comida que se les ofrece, así como también solicitaron que se aumente la porción que se les brinda ya que la misma no satisface sus necesidades.
Igualmente, señalaron que no se le ha dado respuesta a sus peticiones en cuanto a las necesidades de implementos y equipos de limpieza (botas, guantes, clorox, desinfectantes, machetes, bolsas de plásticos para la recolección de basura, rastrillos, escobas, jabón para limpieza, etc.) lo que pone en riesgo su salud.
Así mismo, solicitaron que se cumpla con la tabla progresiva de salida, recibir atención médica, igualdad para todos los privados de libertad, toda vez que sostienen que hay un grupo que son favorecidos con permisos especiales de salida y a otros se les niega los mismo, además piden que se explique que se hace con el dinero producto de la venta de la cosecha de los cultivos.
Por su parte, los funcionarios de la Defensoría del Pueblo manifestaron que la entidad ha realizado diversas gestiones tendientes a que los privados de libertad reciban una alimentación balanceada y cuyo valor nutritivo sea suficiente, que el lugar donde se elaboran los alimentos este limpio y que cada manipulador de cuente con su respectivo carnet de salud.
Además, se procedió a inspeccionar en conjunto con el Departamento de Protección de Alimentos del Ministerio de Salud y representantes de la empresa que se encarga de suministrar los alimentos para privados de libertad.
Cabe destacar que durante el encuentro se realizó una inspección al área donde se distribuyen los alimentos encontrándose que la manipulación no es la correcta y los encargados de repartir los alimentos no cuentan las medidas de higiene y salubridad (delantal, guantes y gorras para cubrir sus cabezas).
También, se constató que la cantidad de comida que reciben los detenidos intramuros es mayor a la que se les da al resto de los privados de libertad. Cabe destacar que luego de la reunión sostenida con los privados de libertad y tras la confianza depositada en los oficiales de Derechos Humanos de la Defensoría del Pueblo se logró que se desistiera de las medidas de presión.
FUENTE: Defensoría del Pueblo de Panamá