“La problemática en el sistema penitenciario puede tener solución si sumamos esfuerzos en un trabajo conjunto, con autocrítica”, dijo Raúl Plascencia Villanueva, presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, durante su participación en la IV Conferencia Nacional del Sistema Penitenciario.
Ante autoridades federales y directores penitenciarios de toda la República, el Ombudsman nacional indicó que la CNDH tiene el compromiso de llevar a cabo la tarea de supervisión de lo que está sucediendo en cada uno de los 428 centros de reclusión que hay en el país. La reinserción a la sociedad, explicó, solo se puede dar bajo la base del trabajo, la capacitación laboral, la educación, la salud y el deporte.
Se requieren estrategias políticas y recursos económicos que permitan en buena medida poder lograr estos objetivos. Corresponde a la CNDH llevar a cabo la supervisión penitenciaria y la instrumentación del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura y otros Tratos Crueles, Inhumanos o Degradantes. Raúl Plascencia consideró que el Estado a través de las instituciones públicas debe cumplir no solamente con readaptar socialmente a los internos, sino también prevenir la aparición de comportamientos antisociales o de conductas delictivas.
Durante su exposición relativa a la Recomendación General 18/2010: Derechos Humanos y Administración Penitenciaria, el Ombudsman nacional indicó que existe rezago legislativo y carencias en centros penitenciarios de varios estados de la República. También encontramos, añadió, instalaciones en condiciones de abandono y sin sanidad, por lo que se requiere inversión presupuestal para cumplir con el compromiso de una readaptación social basada en el trabajo, la educación, el deporte y la cultura. El 46% de los centros de reclusión no cuenta con el equipo, la capacitación y la remuneración adecuados para que el personal de seguridad y custodia pueda realizar sus funciones, situación que con la sobrepoblación penitenciaria se complica, dijo Raúl Plascencia.
FUENTE: CNDH de México.