MÉXICO D.F.: Seminario Religiones y Laicidad en el México Actual: Análisis y Desafíos sobre el Tema de Estado Laico

La sociedad mexicana es plural en sus formas de vida y tradiciones que se reinterpretan en prácticas y exigencias ciudadanas de inclusión y reconocimiento, en escenarios para el ejercicio de la libertad religiosa y en los potenciales conflictos que surgen de las diversas interpretaciones de este derecho, advirtió el Secretario de Vinculación con la Sociedad Civil e Incidencia en Políticas de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), José Antonio Guevara Bermúdez.


En razón de ello, explicó en la inauguración del Seminario Religiones y Laicidad en el México Actual: Análisis y Desafíos sobre el Tema de Estado Laico: “Es necesario reafirmar el carácter laico del Estado mexicano, pues de otra manera la pluralidad sería observada como  fragmentación y no como parte de la riqueza cultural que distingue a la sociedad de todo el país”.

Para la CDHDF, agregó, el laicismo, la laicidad, constituyen el marco para la impartición de una educación cívica que oriente a las personas hacia la construcción, no sólo de una política del respeto a las diferencias, sino también de un contexto de diálogo democrático, en el que la pluralidad social sea valorada de manera positiva y la no discriminación se observe como una tarea fundamental en la consolidación democrática.

Guevara Bermúdez señaló que la laicidad de las instituciones políticas implica también que las normas y criterios con los que el Estado rige su acción, no deben estar definidos por un credo religioso o  moral particular: “La laicidad es una forma de garantizar y proteger el derecho de todas las personas a decidir de manera libre acerca de su religión; constituye además un freno a cualquier tentativa de oficializar una opción religiosa o moral, la cual, incluso siendo la que profese la mayor parte de la población, no debe tener carácter obligatorio”.

La defensa del Estado laico y de las instituciones que tutelen los derechos que todas las personas, sin discriminación e independientemente de las doctrinas religiosas, así como su obligación de comprometerse con el respeto irrestricto de pluralismo religioso y la no oficialización de ninguna religión en particular, está asentada en el Artículo 24 constitucional y en los instrumentos internacionales de derechos humanos que reconocen específicamente la libertad religiosa.

“La CDHDF reafirma su convicción en el sentido de que la visibilidad social de la pluralidad religiosa es un claro avance en la consolidación democrática de nuestras instituciones, así como que todas las vulneraciones al derecho a la libertad de conciencia y de religión tienen que ser combatidas y desalentada la discriminación por motivos religiosos”, subrayó Guevara Bermúdez. En su intervención, la Directora de Católicas por el Derecho a Decidir, A.C., María Consuelo Mejía Piñeros, se refirió a los desafíos que representan la intensificación de los embates de la jerarquía católica conservadora en contra del principio de laicidad del Estado mexicano, con el fin único de recuperar sus privilegios económicos, políticos y sociales, así como su hegemonía cultural.

Señaló que las personas que más afectadas han resultado son las y los creyentes de otras doctrinas, así como las mujeres en general, y las y los jóvenes, quienes son agraviados en su derecho a la libertad de conciencia, esencial para el ejercicio de su autonomía. Por su parte, la Secretaria Ejecutiva del Observatorio Eclesial, Gabriela Juárez Palacios, señaló que las siete organizaciones que lo componen realizan labores de vigilancia y análisis del quehacer eclesial para que se respete el ejercicio de los derechos humanos, la democratización al interior de las iglesias, así como la defensa del ecumenismo, la paz y la laicidad. Anunció que, ante la proximidad del proceso electoral de 2012, las organizaciones del Observatorio darán a conocer un Pronunciamiento en favor del Estado Laico.

El Rector de la Comunidad Teológica de México, Dan González Ortega, reseñó el quehacer académico de la institución que encabeza y subrayó la diferencia entre laicidad y laicismo, dijo que la primera es positiva porque permite el diálogo, la construcción ciudadana a partir del reconocimiento de las distintas construcciones religiosas.

Caminar desde la perspectiva del laicismo, explicó, como dogma, como el conjunto de doctrinas que intentan alejar las expresiones religiosas de la participación ciudadana, es una recta que se hace a la construcción de ciudadanía, como lo reafirma la tradición protestante. “Ser protestante es ser ciudadana o ciudadano; por eso estamos aquí, eso es algo trascendental. La construcción del pensamiento laico de este país se construyó con la participación ciudadana de la ética protestante y del cristianismo protestante”, sostuvo González Ortega.

El titular de la Secretaría de Asuntos Jurídicos del Foro Intereclesiástico Mexicano A.C., Jesús López Lobato, cuestionó las declaraciones de la Presidencia de la República, del 12 de octubre pasado, sobre que independientemente de ser creyentes o no, todas y todos los mexicanos son guadalupanos y que la Basílica de Guadalupe es un favor de integración social y de afianzamiento de la identidad nacional y la unidad.

Al rechazar tales afirmaciones, dijo que las más de 150 organizaciones civiles que representa se consideran agraviadas en su libertad religiosa y las consideran anticonstitucionales y un atentado al carácter laico del Estado, donde no cabe establecer privilegio en favor de ninguna religión: “¿Acaso para el Primer Mandatario, los no guadalupano no somos mexicanos?”, cuestionó.

En el Panel 1 “Origen histórico del Estado laico: marco conceptual”, participaron el investigador del Centro de Investigaciones sobre América Latina y El Caribe de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Rubén Ruiz Guerra; el investigador de la Universidad Sämann, de Jalisco, Marcos Antonio Soto Rodríguez; Ignacio Cuevas, del Observatorio Eclesial; y Austreberto Martínez, del Instituto Mexicano de Doctrina Social Cristiana (IMDOSOC).

En el Panel 2 “Análisis sobre Estado laico en el México actual”, participó Bernardo Barranco, Sociólogo de la Religión; Felipe Gaytan Alcalá, de la Red Iberoamericana para las Libertades Laicas; y Jesús López Lobato. En el Panel 3 “Nuevos desafíos y situaciones religiosas en México” participaron el Director del  Centro de estudios Sociológicos del Colegio de México (Colmex), Roberto Blancarte; el Director de “Revista Voz y Voto”, Jorge Alcocer; y Martha Tagle, de República Laica.

 

 

FUENTE: Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal de México