Los derechos humanos son una victoria cultural del pueblo de México que debemos consolidar y hacer irreversible. No pueden ser vistos como una moda política ni tampoco deben estar condicionados por ideologías o visiones partidistas, aseguró el Presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, doctor Raúl Plascencia Villanueva.
Ningún actor político o social, agregó, puede reclamarse poseedor único o exclusivo de la bandera y el discurso que se enarbolan en su defensa. Se trata de una responsabilidad compartida que obliga a las autoridades y también exige la mirada alerta y la protección de las organizaciones civiles, así como la reflexión y la crítica de las instituciones académicas.
Luego de firmar sendos convenios generales de colaboración con la Universidad Autónoma, la Federación de Profesionistas y la Federación de Colegios, Barras y Asociaciones de Abogados, todas de Nuevo León, explicó que el respeto a los derechos humanos es el mejor indicador de la calidad democrática de una sociedad.
Estos acuerdos, abundó, se suman a los signados meses atrás con los tres poderes constitucionales y comunidades universitarias de esta entidad, con la finalidad de sentar las bases para promover la observancia, el estudio, la enseñanza y la divulgación de los derechos humanos.
El compromiso plasmado en papel, mencionó, es una muestra de la actitud abierta y comprometida de la sociedad regiomontana y refrenda el espíritu de solidaridad y trabajo de las partes por el bien de la sociedad neolonesa.
Asimismo, refirió que la creación de instituciones no es suficiente para hacer realidad tales derechos; se requiere del compromiso y empeño de todos para impulsar la consolidación de una cultura de protección a la dignidad humana.
Educar en derechos humanos es inculcar valores y fomentar actitudes de respeto a los demás, a las instituciones y a las normas jurídicas, comentó.
No obstante, dijo, aún contamos con innumerables rezagos y tareas pendientes. Cerrar los ojos a esta realidad no sólo sería ética y políticamente una irresponsabilidad. Nos convertiría también en cómplices de la desigualdad, la inequidad y la exclusión que todavía prevalece en nuestra nación.
El Presidente de la CNDH expresó también: Si los mexicanos aspiramos a hacer de nuestro país una república más incluyente, libre y segura, todos, desde nuestros respectivos ámbitos de acción, debemos ser congruentes y hacer que nuestro actuar cotidiano se convierta en ejemplo de enseñanza por los derechos humanos, a fin de que éstos se constituyan en hábito cotidiano y por lo tanto en el imperativo categórico que sustente las decisiones públicas y privadas.
Estuvieron presentes el doctor Jesús Ancer Rodríguez, rector de la Universidad Autónoma de Nuevo León; contador público José Cárdenas Cavazos, rector de la Universidad Santa Catarina; doctor Alejandro Martínez Padilla, presidente de la Federación de Profesionistas de Nuevo León, A.C.; maestro Jesús Sepúlveda Ponce, presidente de la Federación de Colegios, Barras y Asociaciones de Abogados de Nuevo León, A.C.
Fuente: CNDH