La Ley de Procedimientos Especiales en materia de Familias, Niños, Niñas y Adolescentes constituye un avance jurídico fundamental para la defensa de los Derechos Humanos de la sociedad venezolana.
Así lo consideró la directora general de la Escuela de Derechos Humanos, Wendy Torres, quien en el marco del II Encuentro del Sistema de Protección del Niño, Niña y Adolescente -realizado en el estado Bolívar- señaló que este nuevo instrumento legal complementa la Ley Orgánica para la Protección del Niño, Niña y Adolescente, la Ley de Lactancia Materna y la Ley Orgánica sobre el Derecho a la Mujer a una Vida Libre de Violencia, entre otras.
“Estas leyes son totalmente garantistas y han sido reconocidas por la Convención sobre los Derechos del Niño. Debemos recordar que en el año 2007 se reconoció a Venezuela como uno de los países con el marco jurídico más progresista en materia de derechos humanos”, afirmó. Durante su ponencia destacó que esta Ley incorpora la mediación y conciliación como elementos que permitan resolver situaciones que afectan al grupo familiar. “También incorpora a los Comités de Protección de los Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes al Sistema Integral de Protección de esta población”, agregó.
Esta normativa incluye tres aspectos fundamentales: el desarrollo de la conciliación en los Consejos de Protección y en las Defensorías, al igual que la mediación en los Tribunales de Protección y dentro de los espacios comunitarios, a través de los Comités de Protección y los Consejos Comunales. Torres enfatizó la necesidad de que el Poder Popular trabaje de manera articulada con los Consejos de Protección para mediar y conciliar con las familias cuando se presenten situaciones de violencia. “Si se resuelven estos problemas a este nivel no habrá necesidad de acudir a instancias superiores”, acotó la funcionaria.
Finalmente, reiteró que tanto los funcionarios y funcionarias, como la población en general deben contribuir con la siembra de valores de paz, armonía y tolerancia para que exista una mejor convivencia familiar y una sociedad más fortalecida.
FUENTE: Defensoría del Pueblo la República Bolivariana de Venezuela