MÉXICO: Capacitan sobre acoso escolar a niños, padres, maestros y autoridades

Ante el incremento de casos de acoso escolar o bullying en nuestro país, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, que preside el Doctor Raúl Plascencia Villanueva, lleva a cabo acciones de capacitación dirigidas a alumnos, a sus familiares, docentes y autoridades educativas a fin de prevenir el fenómeno.

La CNDH ha desarrollado la Campaña para Abatir y Eliminar la Violencia Escolar, que consiste en impartir cursos especiales en planteles educativos para que se conozca, entienda, prevenga y combata este fenómeno de violencia que trastoca la convivencia escolar de niñas, niños y jóvenes. 

Estos cursos se basan en los siguientes temas: fomento de valores, impulso de la cultura de la denuncia y creación de un ambiente pacífico. El número de casos de acoso o bullying en nuestro país ha aumentado y afecta a 40 por ciento de los 18 millones 781 mil 875 alumnos de primaria y secundaria, en instituciones educativas públicas y privadas.

De acuerdo con estudios de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México ocupa el primer lugar internacional en casos de bullying entre estudiantes de secundaria.

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) señala que 11 por ciento de los estudiantes mexicanos de primaria han robado o amenazado a algún compañero, mientras que en secundaria ese porcentaje es de poco más de 7 por ciento.

Estudios realizados por autoridades educativas de nuestro país indican que 43.2 por ciento del personal docente encuestado (324 directores/as y mil 485 maestros/as) afirman haber detectado casos de bullying. 

La Comisión Nacional considera esta situación, atenta contra el derecho a la educación y la integridad física y psicológica de la infancia y la adolescencia. Para combatir el acoso escolar, las autoridades educativas deben fortalecer una política integral que involucre al personal docente, a directivos, padres y madres de familia, tutores y estudiantes. Buscar que los planteles educativos sean espacios seguros, con vigilancia y supervisión eficaz y constante: salones de clase, patio de recreo, cooperativa, baños, pasillos y sus alrededores.

Se debe impulsar la cultura de la denuncia, escuchar y atender a los estudiantes para proceder a dar el debido seguimiento a cada caso en particular y solucionar los conflictos.

FUENTE: Comisión Nacional de Derechos Humanos de México