A pesar que la educación básica y la erradicación del analfabetismo es una función primordial del Estado, definida en la Constitución de la República, más de un millón de niños, niñas y adolecentes están fuera del sistema de cobertura educativa, cuestionó el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos.
Ramón Custodio, titular del organismo humanitario, señaló que las huelgas permanentes, por parte del gremio magisterial, aunado a otra serie de factores, son las que en definitiva están violentando los objetivos previstos para el alcance de las metas educativas.
Se estima que en Honduras alrededor de 130,000 niños del nivel primario, más de 383,000 adolescentes de ciclo y casi medio millón de jóvenes del nivel medio entre los 16 y 18 años se quedan fuera del sistema educativo. En su informe anual sobre la situación de los derechos humanos en el país, Custodio destacó que entre los problemas que aquejan a la educación está la deserción escolar, la sobre edad, la falta de materiales didácticos en los centros educativos, la uni/bidocencia multigrado y la falta de infraestructura escolar.
Añadió que la falta de mantenimiento de los centros educativos, la pésima calidad de la educación y el incumplimiento de los 200 días de clase, por parte de los maestros, son también parte de los problemas que aquejan a la educación en Honduras. Uno de los cuestionamientos del CONADEH es que si bien, como regla general, por cada cuarenta alumnos se designa un docente, de acuerdo al Currículo Nacional Básico, el 62 % de los docentes de educación primaria enseñan en escuelas multigrados, lo que hace suponer una deficiente calidad en cuanto al tiempo de atención y dedicación a los alumnos por grado.
Ante esa situación, Custodio adelantó que el CONADEH ha iniciado un acercamiento para la organización y fortalecimiento de las Asociaciones Educativas de Desarrollo Local (ADEL), de las Asociaciones Educativas Comunitarias (AECO), las asociaciones de padres de familia y los gobiernos estudiantiles para garantizar el derecho a la educación en el país. De acuerdo a la Secretaría de Educación el promedio de escolaridad de la población adulta subió de 5.6 años en el 2004 a 7.3 en el 2009, sin embargo, el nivel alcanzado por los hondureños esta distante de los 12 años que la CEPAL plantea como necesarios para que una persona evite la pobreza.
Al respecto, algunos estudios indican que apenas el 22.7% de la fuerza laboral en Honduras cuenta con 12 años o más de escolaridad. Un dato importante en la educación hondureña es que ocho de cada diez alumnos que se matriculan en primer grado permanecen en la escuela y llegan hasta el sexto año pero sólo tres de cada diez se gradúan en la edad oportuna.
El Ombudsman hondureño lamentó que los centros de enseñanza pública hayan perdido credibilidad y ha ocasionado que muchos padres de familia, pese a sus limitaciones económicas hayan tomado la decisión de matricular a sus hijos en escuelas e institutos privados.
Agregó que como consecuencia de la extrema pobreza que afecta a cinco de cada diez hondureños, muchos niños no terminan su primaria ya que se ven obligados a incorporarse al mercado laboral y los jóvenes son retirados de los establecimientos escolares para ocuparse de trabajos en el hogar. Reiteró las huelgas realizadas durante todo el año por los maestros, impide que la niñez hondureña goce efectivamente del derecho a la educación, como lo establece la Constitución de la República.
Lamentó que la dirigencia magisterial tenga que exhortar constantemente a las bases para que abandonen sus labores como docentes solo para enfocarse en sus beneficios económicos y en sus luchas ideológicas por sobre el derecho de los niños a la educación. Para el titular del CONADEH, es indispensable garantizar el derecho a la educación, como un pilar fundamental para el desarrollo del país.
Pese a que Honduras destina gran parte del Producto Interno Bruto percapita para educación, los resultados indican que los hondureños cuentan con la peor enseñanza de Centro América. “El sistema educativo hondureño es un fracaso, somos el país, en Centro América, que más invertimos en educación y los que tenemos los peores resultados en cuanto a la calidad educativa, particularmente en español y matemáticas”, comentó.
Algunos sectores consideran que el sistema educativo hondureño tiene un retraso de aproximadamente 3 décadas respecto a El Salvador y de casi un siglo en comparación a países como Costa Rica y Panamá. Custodio sostuvo que el sistema educativo en Honduras es un “descalabro” y que la parte más afectada son los niños y los adolescentes que se quedan con una pésima educación y se les prepara mal para la vida.
En su criterio, si el sistema educativo ha fracasado es necesario buscar la solución pero con base en el diálogo no con garrotes ni tampoco con llantas quemadas ni con bombas molotov. Se estima que en los últimos cinco años, Honduras “invirtió”, cerca de 98 mil millones de lempiras en una educación en la que apenas se imparten alrededor cien días de clase al año y en el que más del 90% del presupuesto es destinado al pago de personal.
FUENTE: CONADEH. Honduras.